Su segundo resurgir en la presenta temporada

Con su actuación ante el Zaragoza, Kaká dejó la sensación de resurgir por segunda vez esta temporada. Completó su tercera titularidad consecutiva (tras Athletic, y Barcelona en Copa), confirmando su vuelta al mejor nivel. Algo que ya sucedió el pasado mes de octubre, cuando formó parte del once en seis de siete encuentros seguidos (con la excepción de Lyon en Champions). Una secuencia que empezó ante el Espanyol y terminó con su partidazo ante el Villarreal, donde completó los 90' por primera vez en seis meses. Sentó por segunda vez a Özil en el banquillo. Menezes le convocó para jugar con Brasil (algo que no sucedía desde Sudáfrica) ante Gabón y Egipto. Y fue entonces cuando su lesión de Anoeta en el sóleo, a la siguiente jornada, lo devolvió a la realidad. Reapareció antes de Navidad, pero se fue de vacaciones partiendo de cero, con el propio Özil y Callejón por delante de él para un puesto.

El Clásico de Copa del Bernabéu supuso un punto de inflexión para Kaká. Tras esa derrota (fue suplente) ha compartido la mediapunta con Özil ante Athletic, Barça (vuelta copera) y Zaragoza con excelente resultado. Sólo falta saber cuánto tiempo le permitirá aguantar su físico. Por este motivo la aportación del brasileño esta temporada (entre lesiones y periodos de puesta a punto) deja mucho que desear: ha jugado el 38% de los minutos posibles (1.161 de 3.060), el 37% de los posibles desde que llegó al Madrid en 2009 por 67 millones de euros (4.675 de 12.540).­