El Inter festeja la Coppa y el Mónaco desciende

Ricki Álvarez, suma y sigue. Zurdo, buena arrancada, ayer marcó un golazo con Vélez y dio otro paso en su probable llegada a Europa. Le vimos en la semifinal de Libertadores ante Peñarol y por él suspiran Roma o Arsenal. Y suena con fuerza para el Málaga a sus 23 años.

Media hora de Pastore. Perdía el Palermo cuando Pastore se echó al equipo a la espalda. Pidió el balón, se ofreció y durante media hora dio un recital. Cambios de ritmo, pases en profundidad y liderazgo. Jugó e hizo jugar a los demás. Fue Pastore en estado puro. Quizá su último partido en el Palermo.

Mónaco, unido al Deportivo. Finalista en 2004 de la Champions con Deschamps y Morientes, ayer se fue a 2ª de forma cruel, con goles de Lisandro y Diakhate que metieron al Lyon en la previa de Champions. El Depor, semifinalista de aquella Champions también ha descendido.

Lágrimas de Miccoli. Suplente en la final por lesión que le impidió brillar en la temporada en el Palermo, Miccoli entró en el segundo tiempo, rozó el empate y acabó roto en un final tremendo. Sus lágrimas y las de Delio Rossi representan las de toda la afición siciliana.

ETOO. El AS de la semana

Dos pases de Sneijder, dos mano a mano con el meta del Palmermo Sirigu, dos definiciones espléndidas para darle la Copa al Inter. Ni la impresionante aparición de Pazzini en el mercado invernal de diciembre le han quitado a Samuel Etoo la etiqueta de mejor interista de la temporada. Tiró del equipo, jugó en varias posiciones en ataque y brilló en casi todas. Como casi siempre, en realidad. Segunda temporada en el Inter, 21 goles y la sensación de que no parará de crecer más aun. Y siempre en partidos decisivos. Ante el Bayern en Champions, en la semifinal de Coppa ante la Roma. Y en la final, por supuesto, ante el Palermo.