segunda b | castilla 4 - atlético B 3
El Castilla resuelve el primer derbi en sólo cinco minutos
El partido se inclinó de forma decisiva entre el minuto 39 y el 44, en los que el Castilla anuló el gol inicial del Atlético con un ciclón de fútbol coronado con tres goles. Al final, pidió la hora.
El Real Madrid Castilla se adjudicó el derbi del Grupo I de Segunda División B al imponerse al Atlético de Madrid por 4-3 en un emocionante duelo que no se decidió hasta el último segundo del tiempo añadido, donde el filial rojiblanco dispuso de varias ocasiones para empatar un partido intenso que se le escapó en cinco minutos trepidantes de los madridistas.
Con un gran ambiente en el estadio Alfredo Di Stéfano de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, y con el técnico del Real Madrid, José Mourinho , tomando notas en el palco, los pupilos de Alberto Toril demostraron pegada y contundencia en el remate ante un rival peleón que no renunció al partido cuando este parecía resuelto (4-1 al inicio de la segunda parte).
Pese a la ausencia en el banquillo del sancionado Toril (dos partidos por su expulsión ante el Conquense), el filial madridista arrancó con las ideas claras y decidido al ataque, propuesta a la que el Atlético respondió con mucha personalidad y bajo el mando de Perea, que asumió el peso ofensivo y provocó las primeras jugadas de peligro rojiblanco, que se concretó en el minuto 7 con un buen gol de cabeza de Batres.
El tanto afectó al juego del Castilla, que tardó en sacudirse la presión hasta pasada la media hora de juego. La reacción tardó en llegar, pero cuando llegó fue un ciclón. En el minuto 39 Morata remató en boca de gol una extraordinaria galopada de Juan Carlos por la izquierda, que culminó con un centro raso.
El empate llegaba a seis minutos del descanso, pero en ese intervalo el Castilla hilvanó un fútbol total que desarboló al Atlético, superado por el centro y por las bandas, por arriba y por abajo. Seis minutos de exhibición en los que la pelota parecía teledirigida hacia la portería de Iago, que tuvo que recoger el balón de sus redes hasta en tres ocasiones.
La primera, sólo tres minutos después del empate de Morata. Borja cabeceó en propia puerta una falta que Fran Rico dirigió de forma envenenada el área pequeña. Era el minuto 42, y en el 44 Joselu subía el tercero como rúbrica a una hermosa acción de Juanfran; este avanzó como un misil por su banda, la derecha, hasta ganar la línea de fondo y servir un centro raso y medido al palo largo.
En un pestañeo el Castilla había volteado el marcador ante la perplejidad de su rival, que regresó del descanso con la misma incredulidad con que se marchó a la ducha, y lo pagó caro. En el primer minuto de la reanudación Álex Fernández logró el cuarto tanto con una fuerte volea dentro del área, un premio a la meritoria jugada de García Noblejas por banda izquierda.
Reacción de equipo grande
Con el partido sentenciado, el Madrid continuó tejiendo su fútbol y creando peligro, y pudo aumentar su ventaja en dos acciones claras que llevaron el delirio a las gradas. Pero cuando el público se frotaba las manos llegó la reacción del Atlético, en lo que fue una respuesta generosa de sus jugadores hasta el pitido final que a punto estuvo de llevarles hasta el empate.
Borja recortó distancias con un fuerte disparo en el minuto 77, y en el 87 fue Pulido el que apretó el duelo aprovechando un error de la zaga madridista.
A partir de ahí todo fue pundonor rojiblanco, que sometió a un asedio la portería de Mejías y se hizo acreedor de un empate que pudo llegar hasta el último suspiro.
Al final, victoria del Castilla en un emocionante partido de filiales que, esperemos, haya servido de antesala al espectáculo que deben ofrecer sus mayores el próximo sábado en el Vicente Calderón.