Preciado recupera el equipo tipo ante el Getafe

Preciado recuperará ante el Getafe un once que se aproxima más a la que puede considerarse tipo en las últimas jornadas, tras los siete cambios que el técnico aplicó en el partido de Sevilla, al haberse jugado el martes. Es una costumbre que mantiene desde que llegó a Gijón, aunque los resultados casi nunca fueron favorables para su equipo. Para recibir al Getafe, su idea es confeccionar un equipo que podría tener hasta ocho cambios respecto al que perdió en Sevilla, pendiente de los recursos por la expulsión de Eguren y por el estado de Rivera, que sigue con unas molestias que preocupan al técnico. El manchego sufrió un esguince hace 12 días, pero, aunque se había valorado su presencia en el equipo tanto ante el Zaragoza como en Sevilla, aún sigue pendiente de evolución ante el partido frente a los getafenses.

El regreso de Botía, tras cumplir un partido de sanción, podría estar acompañado de la continuidad de Gregory, la pareja de centrales que más utilizó Preciado, tanto en esta campaña, como en la anterior, aunque en las últimas ocho jornadas, Iván Hernández se ganó el puesto, al haber aprovechado una lesión de Botía, primero, y una ausencia por sanción de Gregory, después. Ahora puede ser víctima del sistema de rotaciones. José Ángel tiene opciones de volver a su puesto y el técnico recupera el tridente atacante, formado por De las Cuevas, Barral y Diego Castro, además de André Castro y Nacho Cases, con quienes Preciado cambió el estilo del equipo.

Preocupación por volver a caer en el descenso

Debido al triunfo del Zaragoza ante el Athletic, el Sporting pasó a ocupar una posición de descenso, lo que alimentó el grado de preocupación en el seno del club gijonés. La nueva situación de los rojiblancos en la clasificación obliga a afrontar el encuentro ante el Getafe con la urgencia de ganar. El lastre del equipo de Preciado es que defensivamente mantiene unas estadísticas aceptables, sólo mejoradas por el Barcelona, Real Madrid, Valencia, Villarreal y Osasuna, pero las ofensivas sólo son mejores que las del Deportivo. Esa falta de equilibrio aumenta la preocupación, sobre todo tras ocupar una plaza de descenso, con una ineficacia de los tres delanteros específicos que no se esperaba antes del inicio de la competición.