La Peace Cup espera a Cristiano y Benzema

En esta Peace Cup hay 13 Copas de Europa repartidas por la competición (empujan, claro, las nueve del Real Madrid), pero la proyección de esta edición no se entiende por los títulos. La Copa de la Paz verá el debut de Cristiano Ronaldo en Madrid, lujo exclusivo que otros veranos perteneció al Trofeo Bernabéu y esta vez recae en esta competición de buenas intenciones que empieza a coger cuerpo. Y con Cristiano, Karim Benzema, última estrella de la competición, que conquistó en 2007 con el Olympique de Lyon. Entonces ya era el búfalo que apuntaba a futbolista grande.

Y si el domingo todos los focos no lo mirarán a él es por Cristiano, cuyo parecido a Beckham está en el club de procedencia y en su músculo económico como icono publicitario. Pero el luso no llenará el Bernabéu el domingo por eso. A él le sobra con el fútbol. En espera de Kaká, Cristiano y Benzema son los grandes reclamos para el madridismo e inmejorables trampolines para la Peace Cup, competición que este año podría reafirmarse en el calendario sólo gracias a esto.

Pronósticos.

El sistema de competición no admite confusión. Sólo el primero de cada uno de los cuatro grupos estará en semifinales. Los pronósticos permiten pensar en una semifinal Real Madrid-Sevilla o Juve y otra entre el Lyon (que le ha robado al Oporto, su rival del grupo, a Lisandro) y el vencedor del Málaga-Aston Villa de mañana en La Rosaleda, sede que ha recibido con animación la competición. Los organizadores coreanos han hecho de todo para promocionar el evento, desde subir a futbolistas a tablaos flamencos hasta plantar árboles coreanos en mitad del campo. Pero piensan. Hace un mes sustituyeron al Celtic por el Atlante mexicano para garantizarse otro contrato fuerte de televisión. Aunque para audiencias, las que va a dar Cristiano.