Munitis reta al 'Moro'

La Copa del Rey de la temporada pasada sirvió para que el Racing escribiera el mejor capítulo de su historia y para que el Valencia maquillara el caos en el que se sumió el club. El primero jugó las semifinales del torneo y acarició la final hasta que Casquero se cruzó en su camino. El segundo lo ganó. Por eso ambos aprecian la competición como nadie, la ven como una oportunidad inmejorable para sonreír y no la tachan de estorbo.

Así lo han entendido sus entrenadores. Muñiz pondrá a toda la artillería que tiene disponible ante el rival frente al que resucitó hace dos meses con el famoso Mestallazo (2-4). Y lo hará por dos motivos: porque las rotaciones del pasado sólo le dieron problemas y generaron dudas y debido a que la UEFA ya es historia y hay menos minutos por distribuir. Sin Tchité tocado y con Zigic en la grada (el club no pagará la cláusula para que juegue ante su ex equipo), Juanjo o el tocado Toni Moral se juegan un puesto para acompañar a Pereira en la delantera. El resto será lo que viene funcionando: Garay de cerrojo, Munitis como cerebro y Luccin de escoba.

Táctica ché.

Emery, por su parte, no será tan atrevido. Pero no porque desprecie la competición. Sino por su confianza en el resto es brutal y porque ve el partido liguero del sábado ante el Villarreal como una final a la que no pueden faltar sus estrellas. Con estas rotaciones confía en encarrilar hoy el pase a cuartos y, a la vez, dar descanso a los pilares para aplastar al Submarino en el derbi. El equipo viajará en el día y mezclara fijos (Albelda, Marchena...) con suplentes de lujo (Morientes). Su objetivo es claro: marcar, aguantar y sentenciar en Mestalla. El escenario de la deseada final.