"Nadie quiere jugar ahora con Rusia. Están fuertes"

España llega a la cita de mañana con medio año más de competición que su rival. El crudo invierno ruso impide que la Liga comience allí hasta marzo, y las piernas de los futbolistas de Hiddink permanecen así mucho más descansadas que las de los jugadores españoles. El dato podría convertirse en una de las claves del encuentro, como confirma a AS una de las eminencias de la preparación física española, Marcos Álvarez. El ayudante de Juande Ramos ganó dos UEFAS y una Copa con el Sevilla y luego ha vuelto a probar el sabor del éxito en su club actual, el Tottenham inglés. Ahora avisa sobre Rusia: "Nadie quiere jugar contra los rusos al final de temporada, porque están más descansados, son mucho más fuertes. Sólo hay que ver los partidos que hizo el Zenit en la UEFA, en la final con el Rangers y, sobre todo, contra el Bayern en la semifinal. Llegaron mucho mejor que sus rivales". Según Marcos, que los jugadores del Zenit sean mayoría en Rusia es malo para el equipo español: "Son potentes, y muy rápidos. Físicamente, uno de los mejores equipos del continente. Quizá por eso Hiddink ha tirado de muchos de ellos. No se gana una UEFA por casualidad".

Álvarez tira de ciencia para definir con precisión qué es lo que puede ocurrir en el encuentro: "Hablamos de explosividad. De saltos, de sprints de 20 metros, esfuerzos de ese tipo. Un ejemplo: si los españoles son capaces de hacer 10 sprints de 30 metros en todo el partido, es probable que los rusos puedan hacer 12 o 13".

Pero el preparador de Juande tiene también el antídoto: "La clave está en la posesión de balón, y en la organización. España no debe precipitarse y no encajar goles. Si marcan los rusos es fácil que nuestro equipo se descomponga en lo físico. Pero yo espero que pese más la calidad de España".