Entrar en semis, un juego de niños frente a Hungría

España estará en semifinales salvo fracaso mayúsculo. Esa es la conclusión que se debe sacar ante la última jornada de la fase previa que se disputa hoy y que enfrenta a la Selección con Hungría. Sólo un triple empate y una peor diferencia de goles (para lo cual los húngaros deberían ganar por 5-0 o más) apearía al cuadro de Santisteban del Europeo, algo que parece bastante difícil.

Aún así, nadie quiere excesos de confianza en la expedición española. Hungría ya le puso las cosas muy complicadas a Rusia en el encuentro inaugural y viene de golear a Luxemburgo gracias a un segundo tiempo formidable. Pero si España juega como hasta ahora, gran parte del trabajo estará adelantado. El único inconveniente surgido en las últimas horas ha sido la amigdalitis que impedirá jugar a Marcos. De este modo, Baena y Camacho apuntan como mediocentros. Para el malagueño del Barça "cada partido es una historia y va a ser un encuentro más complicado que lo que la gente se cree", mientras que el atlético Camacho es consciente de que "hay que matar el grupo y pasar ganando todos los partidos para no dejar ningún tipo de dudas de cara a las semifinales".

Los checos, posibles rivales en semifinales

España será primera de grupo casi con total seguridad y por lo tanto se enfrentará a la segunda clasificada en el grupo B. Hasta el momento, Alemania y la República Checa han demostrado ser los más fuertes, pero con una ligera ventaja para los germanos en la diferencia de goles. Según lo que acontezca esta tarde, España sabrá con quien deberá lidiar en semifinales, pero todo apunta a que será con los checos.