El Pentágono y el Departamento de Estado de EEUU están considerando la posibilidad de enviar fuerzas especiales para proteger la embajada de EEUU en Kiev, según informa The Wall Street Journal. El portavoz del Departamento de Defensa, John Kirby, confirmó esta consideración en The Washington Post: "Estamos examinando las condiciones de seguridad" de la oficina diplomática en Ucrania "pero no se ha tomado ninguna decisión".

La propuesta, eso sí, aún no ha sido presentada al presidente del país norteamericano, Joe Biden. El Pentágono valora desplegar a su ejército en la capital ucraniana solo para la defensa y seguridad de su embajada, que se encuentra dentro del alcance de los misiles que está utilizando Rusia, según aseguran los funcionarios estadounidenses.

Si finalmente Biden acepta la proposición de su departamento de Defensa, se producirá un gran cambio en el terreno, puesto que la promesa inicial del jefe de la Casa Blanca era que no se mandarían tropas estadounidenses al país invadido por Rusia el pasado 24 de febrero, con el objetivo de evitar una escalada militar en suelo ucraniano, una situación que podría cambiar en caso de que finalmente lleguen tropas a Kiev.

Reabre la embajada de EEUU en Kiev

El estudio del Pentágono de enviar tropas a Kiev llega después de que el pasado miércoles se reabriera la embajada estadounidense en la capital ucrania, tras un cierre de más de tres meses. La oficina norteamericana cerró el pasado 14 de febrero, 10 días antes de que Putin anunciara su “operación militar especial” en Ucrania.

“El pueblo ucraniano, con nuestra asistencia en seguridad, ha defendido su patria frente a la invasión inconcebible de Rusia y como resultado las barras y estrellas vuelven a flamear sobre la embajada. Con orgullo estamos con el gobierno y el pueblo de Ucrania y los seguimos apoyando mientras defienden su país de la brutal guerra de agresión del Kremlin”, dijo el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, tras la reapertura de la embajada estadounidense en Kiev la pasada semana.

Durante todo este tiempo, los funcionarios y diplomáticos estadounidenses han seguido ofreciendo sus servicios desde la ciudad ucrania de Leópolis, en el oeste del país, habiendo ocasiones que han tenido que pernoctar en suelo polaco por motivos de seguridad.