El pueblo de Italia que aspira a ser un país
La localidad de Seborga, situada al norte de Italia, cuenta con 300 habitantes. Dispone de moneda, bandera, pasaporte, y busca su soberanía desde 1960.
A lo largo de la historia diferentes regiones europeas han reivindicado su soberanía y el derecho a decidir su futuro, como Flandes, País Vasco o Cataluña. Precisamente en la región catalana, a diferencia de otras en Europa, se mantiene el deseo de independencia por parte de su población y de algunos partidos políticos, como ERC o Junts Per Cat.
Sin embargo, no es el único territorio que reclama la decisión sobre el futuro de su soberanía ya que, en Italia, llama la atención el caso de la localidad de Seborga, ubicada en la región de Liguria, al norte del país y cerca de la frontera con Francia. Desde el año 1960, esta localidad ha reivindicado su derecho a ser un país, después de que Giorgio Carbone, que dirigía una cooperativa local de cultivadores de flores creó la idea de una Seborga independiente.
Carbone fue proclamado jefe de estado en el año 1963. El motivo por el cual se pide la independencia y el reconocimiento de esta "micronación" se debe a su consideración como principado independiente hasta el año 1729, cuando fue vendida por monjes benedictinos al Reino de Cerdeña, que más tarde pasaría a formar parte del Italia. Según el punto de vista ofrecido por Carbone, no hay ningún documento que acredite este hecho, por lo que entienden que el municipio nunca fue parte de Italia.
Con respecto a este territorio que autoproclamó su independencia en 1960, Seborga cuenta con una población de unos 300 habitantes y una superficie de unos 14,07 kilómetros cuadrados. Además del euro, cuentan con una moneda propia, el Luiginio, que equivale a unos seis dólares y a poco más de cinco euros, aunque no dispone de ningún valor legal al no estar reconocida ni a nivel nacional ni tampoco a nivel internacional. Además, cuenta con bandera propia e himno.
En el año 1995, los vecinos de la localidad votaron para la creación de una Constitución para su principado y su forma de gobierno es la monarquía, cuyas elecciones se celebran cada siete años. Una vez fallecido Carbone, los ciudadanos eligieron en votación popular cual sería su próximo monarca. En 2010, eligieron a Marcello I, que abdicó en el año 2019. Su exmujer y empresaria alemana, Nina Menegatto, fue elegida para ocupar el cargo hasta 2026.
Objetivo, hacer de Seborga la nueva Mónaco
Ni Italia por una parte, ni la comunidad internacional por otra, han reconocido la legalidad de este territorio proclamado como principado independiente. De hecho, y tras su llegada al poder, una de las promesas realizadas por Menegatto fue la de conseguir el reconocimiento internacional y convertir a Seborga en la 'nueva Mónaco', que es el Principado que cuenta con más prestigio en todo el mundo.
Por otro lado, el Principado de Seborga cuenta con un Comité Olímpico y con una Asociación de Fútbol, aunque no han sido reconocido por el Comité Olímpico, ni tampoco por la FIFA y UEFA.