No es ningún secreto, ni será una sorpresa para usted, escuchar que la vida se encarece. El precio de los bienes más básicos se dispara, el coste de la electricidad registra máximos históricos y ocurre más de lo mismo con las diferentes energías como el gas y el petróleo. En febrero, el Índice de Precios de Consumo (IPC), que mide la inflación, se ha situado en el 7,4%, lo que supone el máximo en los últimos 33 años, según datos de El Economista.

La vida se encarece. Según el medio mencionado, los cereales suben un 10,6%, las pastas alimenticias un 20%, la carne ovina un 12,6%, el aceite de oliva un 30%, etc. En energía, la electricidad ahora es un 46,4% más cara y los combustibles un 44,6%. El presidente francés, Emmanuel Macron, afirma que “lo peor está por llegar”, y El Economista asegura que la interrupción total de gas y petróleo ruso podría aumentar la inflación un 10%. ¿Y los sueldos? ¿Están también al alza? Tan solo han subido un 1,2% en 2021.

Salarios congelados desde 1979

Javier Ruiz, jefe de Economía en la Cadena Ser, señaló en una entrevista con Uppers que en España “estamos viviendo una glaciación salarial, los salarios están congelados desde 1979”. Para Ruiz no es tanto el problema de la glaciación salarial como el de la desigualdad, “porque tenemos gente que está mejor y gente que está cada vez peor".

Según Ruiz, "tenemos un mercado laboral roto en dos", porque tenemos “trabajadores más o menos estables y trabajadores mucho más precarios. Tenemos una sociedad -y es el gran tema político y económico, que se nos rompe en dos-. La desigualdad es el gran tema".

¿Cómo se puede revertir la situación?

En torno a este problema surge una cuestión, ¿hay que subir el salario inmediatamente? El Gobierno trabaja en un pacto de rentas que pueda ayudar a reducir el impacto de la inflación en España, aunque el propio Ruiz ha afirmado en la Cadena Ser que “lo llamamos pacto de rentas por no llamarlo cómo nos repartimos el empobrecimiento”.

El punto de vista del experto es el siguiente, de nuevo, con la desigualdad como tema a tratar. En primer lugar, “de las guerras siempre se sale más pobre, y llevamos dos: una contra la COVID y ahora otra con Putin”. El pacto de rentas discutirá si este empobrecimiento se destina a las nóminas o también repercute a los márgenes de beneficio de las empresas. Es decir, “si solo pierden poder adquisitivo los trabajadores o también lo hacen las empresas”.

¿Por qué dice esto Ruiz? ¿Les afecta a las empresas tanto como a los trabajadores la inflación? Los precios han subido un 7,4% en febrero y los sueldos solo se incrementaron un 1,2% cuando se cerró 2021. El 80% de las empresas del IBEX ganaron más de lo que perdieron el año pasado, según el experto. El Gobierno quiere reequilibrar esto, que viene produciéndose desde 1979. Estamos en la segunda glaciación salarial.

Y llevamos así desde 1979 porque, por ejemplo, si los precios suben un 2% y los sueldos suben otro 2%, el salario en realidad no ha incrementado, ha igualado a la inflación. Para combatir la inflación y tratar que esta no repercuta demasiado a los ciudadanos, algunos países ya han tomado medidas: Austria cobra impuestos a sus petroleras desde este fin de semana. También Italia, que cobrará a las petroleras un 10% más de lo que hayan ganado entre octubre y marzo de este año.

Esa, quizás, es una forma de combatir la desigualdad de la que habla el experto, para que la inflación no recaiga únicamente en los bolsillos de los trabajadores. Así, Ruiz explica cuál considera la mejor solución: "Lo que yo creo que habría que hacer es un pacto social, sentar a sindicatos, empresarios y partidos de la oposición, porque esto no funciona si no hay acuerdo. Es como la educación: no puedes tener un plan con cada partido. Hay que ir a puestos de trabajo cualificados, educar a los trabajadores, pedirle a los partidos nacionales que se pongan de acuerdo en el mercado laboral".