Carlos San Juan inició hace meses una campaña en la plataforma Change.org para reunir firmas con el fin de denunciar la exclusión financiera a la que están sometidos los mayores. Este hombre de 78 años pedía "un trato más humano" a las sucursales bancarias y exigía que el Ministerio de Economía y el Banco de España realizaran propuestas concretas y respondieran a su petición.

La campaña ha logrado recoger 380.000 firmas y ha cumplido otro de los objetivos de su iniciador: que los responsables del cambio le escucharan. El Ministerio de Economía ya se ha puesto en contacto con él, a través del secretario general del Tesoro y financiación Internacional, Carlos Cuerpo. Este le ha invitado en una llamada telefónica a reunirse con él en el Ministerio para tratar los temas a los que hace referencia en su campaña.

"Me han agradecido haber iniciado esta campaña y me han invitado a mantener una reunión. Yo les he transmitido algunos de los problemas a los que nos enfrentamos muchas personas mayores cuando tenemos que hacer operaciones bancarias y les he dicho que esta recogida de firmas debería servir para sensibilizar tanto al Gobierno como a los presidentes de la banca", ha explicado el promotor de la petición a Europa Press.

Además, el Banco de España ha contactado también con él para que se cite telefónicamente este mismo jueves con Pablo Hernández de Cos, gobernador de la institución, a quien San Juan le había escrito por carta. "Al gobernador del Banco de España, D. Pablo Hernández de Cos: Mi nombre es Carlos, tengo casi 80 años y a veces no me entiendo bien con las máquinas, las aplicaciones móviles y las cosas de Internet. Y como yo, miles de personas de mi edad", comenzaba la misiva.

"Nos sentimos apartados"

San Juan explica que se encuentra con muchas complicaciones cuando quiere realizar alguna operación bancaria porque "no todas las personas mayores" se manejan con la tecnología. Además, hay quienes no tienen quien pueda prestarles ayuda o simplemente están "cansados de depender de los demás. "Somos perfectamente capaces de manejar nuestros ahorros, pero las trabas tecnológicas nos incapacitan para cualquier operación. Y le voy a ser sincero: estamos bastante hartos. Y tristes también. Porque sentimos que nos están apartando", señala.

Cuando Carlos San Juan recibió estas llamadas y escuchó que el Gobierno urge a los bancos a garantizar la inclusión financiera de los mayores se emocionó. "Estoy casi llorando de emoción pensando en tantos mayores sin voz que pueden recibir ayuda, en todas las personas que no han podido firmar porque no saben ni cómo pero que se van a ver beneficiadas si de verdad conseguimos este cambio", concluyó, deseando que espera que no sean "solo comunicados con buenas intenciones", sino que se traduzca en una "mejora de la atención".