Los buenos augurios del exdirectivo de la OMS sobre 2022 y la COVID
Rafael Bengoa, quien formara parte de la Organización Mundial de la Salud, vaticina un mejor año en la evolución de la pandemia en una entrevista con Telecinco.
El avance de la pandemia en España se ha acelerado en las últimas semanas, con la rápida prevalencia de la variante Ómicron. Detectada en Sudáfrica y expandida rápidamente a más de cien países en todo el mundo, su mayor particularidad es, precisamente, una mayor capacidad de transmisión. Esto ha provocado el gran incremento de casos en nuestro país, marcando tres días de récords diarios con diferencias de hasta 10.000 contagios.
Esta variante, no obstante, puede suponer el final de la pandemia, como ya han apuntado varios expertos en los últimos días. Adolfo García Sastre, epidemiólogo en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York, explica su teoría. "Se parece más a un virus respiratorio normal. Con dosis de refuerzo, la gente que va a estar expuesta a ella, y una vacuna más basada en esta variante, creo que tendríamos acabados los problemas que este virus da".
A pesar de la alta cifra de incidencia, que alcanza ya los 911 casos (y una cifra de contagios de 72.912 casos en el último informe), los expertos mandan un mensaje de tranquilidad para el próximo año 2022. Rafael Bengoa, exdirectivo de la Organización Mundial de la Salud, vaticina "un año mejor que este", en una entrevista con Informativos Telecinco. "Este año ya fue mejor que el primero, entramos en el tercer año de pandemia con muchísimas esperanzas porque hay muchas más vacunas, y probablemente salgan vacunas multivariantes y nuevos medicamentos".
"Ómicron no es inofensiva"
En primer lugar, Bengoa recuerda que, a pesar de los cuadros menos graves que provoca esta nueva variante, todavía continúa siendo peligrosa para los sistemas de salud a nivel mundial. "Ha cambiado, probablemente ha hecho un trueque entre su capacidad de transmisión y su severidad, pero eso no la hace inofensiva y va a haber muchísimas infecciones, se pueden saturar los sistemas de salud".
Para el experto, las medidas adoptadas en el ámbito nacional para combatir el avance de esta variante son "demasiado flojas. Había margen de maniobra entre la versión más light que tenemos, solo con mascarillas, y lo que ocurre en Países Bajos, donde se declara un confinamiento. Deberíamos haber tenido antes de Navidad algunas decisiones para controlar una variante que sabemos desde hace un mes que es más transmisible".
Cenas de Navidad
La facilidad de propagación de Ómicron es algo que mantiene la preocupación entre los expertos, y más en una época en la que tradicionalmente nos juntamos con amigos y familiares a lo que no solemos ver durante gran parte del año. En este punto, Bengoa apuesta por "evitar las cenas multitudinarias que teníamos antes". En su lugar, considera un máximo de siete u ocho personas "y con las condiciones de ventilación que todos sabemos, además de las mascarillas".
Por tanto, el exdirectivo de la OMS advierte del rápido poder de propagación de esta variante. "Si la comparamos con la primera, el famoso número de reproducción era que una persona infectaba a una persona y media o dos, y esta parece cerca de 8 o 10. Una persona contagiada en una cena de Navidad puede estar infectando inmediatamente a casi 8 o 10 personas". Con todo esto, apuesta por emplear una mascarilla "cuanto más exigente, mejor. O si no, una doble mascarilla quirúrgica también es buena idea".