Investigan un error de protocolo en la primera víctima del volcán
El fallecido, de 72 años, es la primera víctima mortal de la erupción. Las autoridades investigan si hubo un error en la aplicación del protocolo.
Julio, un hombre de 72 años, fue hallado muerto durante el día de ayer en una vivienda situada en el barrio de El Corazoncillo, mientras retiraba el cúmulo de ceniza de su vivienda, propiciada por la erupción volcánica de Cumbre Vieja. Este vecino de la localidad palmera de El Paso pertenecía al amplio abanico de voluntarios, coordinado por el Ayuntamiento y las órdenes del Pevolca, encargados de la retirada de ceniza volcánica. Por ello, las autoridades competentes investigan si su muerte se debe al impacto de la caída desde el tejado o a otra situación desconocida.
La necesidad y obligatoriedad de los vecinos afectados para la retirada de la ceniza volcánica de azoteas y tejados, ha sido uno de los principales cometidos del Pevolca para evitar derrumbamientos por las previsiones de lluvia que afectan a la estabilidad de las edificaciones.
¿Qué dice el protocolo de actuación?
Principalmente, uno de los parámetros a destacar en el protocolo de actuación para la retirada de ceniza y otros elementos, es que nunca se debe participar en solitario, acompañado de una serie de recursos para evitar un accidente de esta magnitud. Únicamente, se permite la limpieza en aquellas zonas que sean suficientemente transitables, acompañadas por un dispositivo de protección.
Seguidamente, todas las personas voluntarias que realicen tareas de limpieza deben estar registradas e inscritas en una lista, que es enviada a la Guardia Civil, y posteriormente custodiada por el Pevolca para conocer la responsabilidad individual de cada uno de los voluntarios. Una vez finalizado el trabajo diario, las autoridades competentes deben garantizar que el personal se marcha de la zona de exclusión de la forma más segura y efectiva.
¿Se incumplió con el protocolo?
La desaparición del voluntario se produjo durante la tarde del viernes, cuando se marchó de la zona de exclusión tras haber finalizado sus respectivas actividades, según cuenta TVE. Sin embargo, nadie le acompañó hasta el límite de la zona afectada, para comprobar su salida, y en vez de irse a su domicilio, se marchó a otro lugar, que probablemente sea el hogar de un allegado del fallecido, indica 20 Minutos.
Posteriormente, la hija avisó a los servicios de emergencia, donde rastrearon la zona sepultada por la ceniza, hasta localizar el cuerpo del varón en el patio de la vivienda en el que se encontraba sin ningún acompañante. Algunas fuentes indican que el fallecimiento se debe a un derrumbamiento de la cubierta del tejado, en el momento de la limpieza, una caída desde el tejado o la inhalación de gases tóxicos procedentes de la zona de trabajo.