Las aguas cercanas a la isla han albergado la primera etapa de la Mini Transat Eurochef, una regata en la que participan cerca de 80 embarcaciones que han pasado casi un mes en la isla disputando la prueba. Esta es una muestra de la normalidad que se vive en la mayoría de la isla más allá del volcán.

El Real Club Náutico de La Palma (RCNLP) ha organizado la acogida de la flota durante la primera parada de la regata, que partió de Les Sables d’Olonne (Francia) y que efectuó este viernes su salida de la Isla Bonita en dirección a la isla de Guadalupe.

"La organización pensó en un puerto alternativo por la situación, pero al llegar el primer equipo de la regata francesa pudieron comprobar que el puerto de llegada era seguro", declaraba en El Mundo José Jaubert, del Real Club Náutico de Santa Cruz de La Palma.

¿Qué es la Mini Transat Eurochef?

La prestigiosa regata transatlántica existe desde 1972, y de origen francés. Además, cuenta con la participación de regatistas de 14 nacionalidades diferentes, en una prueba que consiste en cruzar el Atlántico en solitario y sin asistencia. Los participantes han estado llegando de forma progresiva del 3 al 13 de octubre a la costa de La Palma.

Los 87 barcos participantes abandonaron ayer, 29 de octubre La Palma, en dirección a la isla de Guadalupe, tras más de dos semanas en las que han realizado en diferentes localidades de La Palma, diversas actividades culturales, deportivas y complementarias de carácter solidario en la isla.

¿Se ha desarrollado con normalidad?

Pese al peso mediático que ocupa la erupción del Cumbre Vieja, lo cierto es que si hablamos con los datos notificados por el Pevolca en la mano, tan solo el 10% de la isla se está viendo afectada por el volcán, un dato que hace entender la normalidad con la que se viven algunos eventos como este en la misma isla. La regata supone un gran escaparate a nivel mundial de cara al turismo marino y deportivo, lo que supone una gran inyección económica necesaria en circunstancias como las que vive la isla. Se prevé que la regata desembolse en La Palma 1,2 millones de euros solo con su paso en esta primera etapa.

Turismo para ver el volcán

Más allá de la regata, en este puente han llegado turistas para ver el volcán. Según relata El País, los hoteles de la isla cuelgan el cartel de completo ante el turismo de fin de semanapara ver el volcán. Sin embargo, hay que matizar los números y aforos completos que se están dando en los hoteles, pues desde que comenzó la pandemia un gran número de establecimientos turísticos decidieron cerrar, por lo que ahora el número de plazas y camas es mucho más reducido: 8.000 camas disponibles en enero de 2020 frente a las 4.855 actuales, según el Instituto Canario de Estadística.

Es una realidad. Muchos turistas aprovechan el viaje para acercarse a las zonas más afectadas, guardar ceniza volcánica y curiosear con un fenómeno que no han visto antes. Al menos, no de esta magnitud. A pesar de ello, la demanda también se ha visto reducida. Según declara a El País Carlos García Sicilia, vicepresidente de la patronal Ashotel en La Palma, a lo largo de la semana la ocupación alcanza, como máximo, el 40%.

De esta forma, los hoteleros trabajan “en pérdidas”, pues los touroperadores aportan el 90% de la clientela en temporada alta. La imagen es curiosa: montones de coches de alquiler que se agolpan en calles cercanas a las coladas de lava. Los turistas aparcan sus vehículos incluso en las puertas de acceso a algunos garajes con el fin de fotografiar y observar los efectos del volcán en la isla. Lleno completo y atasco volcánico en La Palma.