Novedades en el Caso Alcàsser casi 30 años después del asesinato de Miriam, Toñi y Desirée. Según informa el diario Las Provincias, la Asociación Laxshmi para la Lucha contra el Crimen y la Prevención, ha pedido a la jueza encargada del caso que se realicen pruebas genéticas a 11 pelos encontrados en los cuerpos de las niñas en 1993. Hay que recordar el caso continúa abierto en el juzgado de instrucción número 6 de Alzira.

La petición debe ser analizada ahora por la jueza del caso, que decidirá si acepta o no la solicitud de dicha asociación, que está personada en el caso como acusación particular. Para realizar este requerimiento, explican que estos pelos apuntarían a Antonio Anglés, fugado desde 1992. De confirmarse esta cuestión, se darían garantías para que Anglés fuera llevado a juicio en caso de que se descubriera cuál es su actual paradero.

Anglés pudo viajar de polizón a Irlanda

Hay que recordar que hace dos semanas, en declaraciones a Más Vale Tarde, el periodista Javier Martínez explicó que el oficial del City of Plymouth, barco que viajó a Dublín desde Lisboa, identificó a Anglés en una foto ante la jueza que instruye el caso. Según su testimonio, se cree que el sospechoso pudo viajar de polizón en el buque. Al llegar a la capital irlandesa, Anglés habría evadido el cerco policial.

Después de estas informaciones, la familia y las acusaciones particulares han pedido mantener el caso abierto, ya que además los crímenes aún no han prescrito. Asimismo, el pasado año, la jueza emitió una orden europea de investigación para solicitar la colaboración de las autoridades del Reino Unido sobre la presunta huida en barco de Antonio Anglés.

La investigación en este momento está centrada en esa supuesta huida, pero ahora la petición para que se analicen pelos encontrados en las niñas en 1993 puede dar un nuevo giro de guión a un caso que está cerca de cumplir 30 años y que aún busca justicia.