¿Por qué la mayoría de los coches que se venden en el mundo son blancos?
El blanco es uno de los colores más habituales en los coches a nivel mundial. Descubre por qué las marcas y los compradores tienen esa fijación por el color
Cada vez que nos movemos por carretera o por la ciudad y miramos a nuestro alrededor, podremos observar que una gran mayoría de los coches que nos rodean son de un color blanco, negro o gris y de estos, la gran mayoría blancos. En el año 2020 fue el color que más se vendió en todo el mundo por las diferentes marcas. Como dato curioso, cada marca tiene un blanco característico o específico.
A la hora de comprar un coche siempre tenemos en cuenta varios factores, entre ellos el color. Algunos se decantan por el amarillo, otros por el azul -en toda la gama de su color- y otros, la gran mayoría, por los tres ya mencionados. A nivel mundial, el blanco es el elegido por la mayoría como color de su coche. En Europa el color dominante es el gris, seguido por el blanco.
Razones de la elección
El blanco es uno de los colores que suele quedar muy bien en todos los coches. Da igual el modelo porque casi siempre le va como anillo al dedo, algunos considerándolo más elegante que, por ejemplo, el negro o el rojo. Además, es una de las opciones favoritas para los compradores de segunda mano, pudiendo no perder tanto dinero en la reventa.
Otra de las razones de peso es que en verano es fresco. Esto se debe a que las superficies blancas son buenos reflectores del calor y la luz. Los coches blancos no se calientan tanto como otros coches de gamas más oscuras, por lo que el interior no se calentará de manera tan exagerada en el aire libre como puede ocurrir con los otros, porque quién no se ha quemado alguna vez al entrar a un coche en verano.
Sin embargo, siempre podremos encontrar una pega a todo lo bueno que tiene y esa es la limpieza. El blanco es uno de esos colores donde cualquier mancha que esté en la superficie va a destacar, por eso puede ser un quebradero de cabeza tener que limpiar el coche más a menudo de lo que podría limpiarlo otro de colores más apagados.