La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha propuesto incluir la actividad de los influencers en el anteproyecto de Ley General de Comunicación Audiovisual, de acuerdo con un artículo de El País.

¿De qué trata el nuevo anteproyecto?

En primer lugar, los influencers elaboran contenido que está patrocinado por empresas y marcas. Cuando los usuarios ven el contenido, confían en el criterio del influencer y adquieren los productos patrocinados. La clave está en que en muchas ocasiones se trata de una campaña de publicidad y no de una opinión o experiencia.

De esta forma, según recoge El País, el regulador indica que “la consolidación de estos nuevos agentes que operan sobre internet requiere de un marco jurídico actualizado que permita lograr un equilibrio entre el acceso a los servicios de contenidos en línea, la protección del consumidor y la competencia”. Pero todavía no se ha establecido una definición de influencer, ni tampoco requisitos legales que puedan precisar quién es o quién no es un influencer.

Aunque la Ley General de Comunicación Audiovisual es un anteproyecto, hasta el momento se les ha aplicado a los influencers la ley de servicios de la sociedad de la información. “Las comunicaciones comerciales realizadas por vía electrónica deberán ser claramente identificables como tales, y la persona física o jurídica en nombre de la cual se realizan también”, afirma la ley vigente.

Obligatoriedad de indicar que se trata de publicidad

Según señala El País, Autocontrol (organismo independiente de autorregulación en España de publicidad) señala que no es suficiente añadir una etiqueta o hashtag para señalar que un contenido es publicidad, sino que recomienda el uso de palabras o expresiones como “publicidad”, “en colaboración con” o “patrocinado por”. Si no se respeta los requisitos legales, los influencers pueden ser sancionados con multas de hasta 30.000 euros, de acuerdo con las declaraciones del abogado Efrén Díaz a El País.