Pasar la ITV puede resultar un quebradero de cabeza para algunos conductores, pues desde la entrada en vigor de la nueva ITV 2021 se presentan nuevas y exigentes normas para ‘aprobar’ el examen de la ITV. Por ejemplo, un problema en los sistemas ABS (Anti-lock Braking System por sus siglas en inglés) o en un retrovisor podrían impedir que nuestro vehículo pase la revisión, además de multas entre los 200 y los 500 euros.

No solo los elementos mecánicos del coche deben estar en regla. Ahora, los controles de la ITV son algo más exhaustivos, pues también es necesario presentar una serie de documentos si queremos pasar la inspección con éxito. Estos documentos son, la Ficha Técnica, también llamada tarjeta ITV (si hemos pasado anteriormente la ITV), el permiso de circulación, una acreditación del seguro y, en algunas provincias, el DNI.

Situaciones especiales

Por otro lado, hay situaciones especiales en las que el vehículo deberá ser presentado en la ITV antes de que vuelva a circular. Estos casos son, según la web de la ITV, “vehículos que hayan sufrido algún accidente, y como consecuencia del mismo u otra causa un daño importante que pueda afectar algún elemento de seguridad de los sistemas de dirección, suspensión, transmisión o frenado, o al bastidor o estructura autoportante en los puntos de anclaje de alguno de estos órganos”.

Cuando esto ocurra, el agente de la autoridad encargado de la vigilancia del tráfico que realice el informe y atestado dirige al coche a una nueva inspección, y tomará el permiso de circulación del vehículo. Solo cuando el titular del vehículo repare el coche y presente el informe, se devolverá el permiso de circulación.

Otra situación especial se produce en un cambio en el destino del vehículo. En estos casos, y según el portal de la ITV, “se deberá realizar una inspección, anotándose en la tarjeta ITV el nuevo destino y la nueva fecha de inspección correspondiente a la nueva periodicidad por el órgano competente de la Comunidad Autónoma donde se ha realizado la inspección.”