Håkan Wernersson, profesor del Departamento de Ciencia de los Materiales y Matemáticas Aplicadas de la Universidad de Malmö, ha liderado un proyecto que podría eliminar un problema muy extendido en la sociedad: el molesto ruido que nos llega desde fuera de casa. No importa si procede de la vivienda de nuestros vecinos o de la calle, el tornillo elaborado por varios investigadores de este centro estaría preparado para recudir a la mitad el nivel de cualquier sonido percibido.

El instrumento, llamado Sound Screw, está pensado especialmente para insonorizar paredes y techos que tengan una estructura de madera, ya que este tipo de construcciones presenta más problemas acústicos que los edificios construidos con hormigón. Además, los creadores de este tornillo consideran que los métodos actuales para insonorizar una sala o una vivienda acostumbran a ser costosos y a ocupar mucho espacio. “Con nuestro tornillo, se pueden montar placas de yeso directamente en las paredes liberando espacio en el suelo y un metro cuadrado de espacio en el suelo puede valer miles de euros”, afirma Wernersson en un comunicado.

Diseño innovador

La principal peculiaridad de este tornillo es su diseño, pues parece que alguien lo haya partido por la mitad y le haya puesto un muelle en el medio antes de armarlo de nuevo. La punta del tornillo se introduce en la madera, de forma que la cabeza sostenga el yeso del panel y ambas superficies queden unidas mecánicamente, evitando el avance de las ondas sonoras. “La dinámica hace que las ondas sonoras se atenúen”, explica Wernersson.

Sus creadores afirman que es muy fácil de instalar y que los resultados del ensayo fueron “asombrosos”, ya que las pruebas del laboratorio mostraron una reducción de sonido de nueve decibeles para una pared seca tradicional, lo que equivale a una disminución a la mitad del nivel de sonido percibido. También resultó ser eficaz en una peluquería, tras instalarlo en el techo sustituyendo los tornillos estándar por los nuevos sin necesidad de retirar la placa de yeso existente.

Estos tornillos todavía no están a la venta, pero los investigadores han creado la compañía Akoustos para publicitarlos. Además, el proyectó fue incluido en la lista de los 100 de 2021 de la Real Academia Sueca de Ciencias de la Ingeniería (IVA) y ha suscitado gran interés en países como Japón y América del Sur.