Venció el plazo. El límite para presentar la declaración de la Renta era hasta el 30 de junio. A estas alturas de la habitual campaña fiscal, la mayoría de los contribuyentes han presentado su documentación en tiempo y forma. No obstante, siempre hay algunos ciudadanos que esperan al último día y se descuidan o bien olvidan sus obligaciones con el fisco.

El tiempo, el primer factor a tener en cuenta

El primer factor que debemos tener en cuenta es el temporal. Sí se puede presentar la declaración fuera de plazo, pero esto supondrá una sanción por parte de Hacienda. A mayor tardanza en realizar el trámite, más alta es la sanción a la que se arriesga el olvidadizo contribuyente.

¿Quién se da cuenta? El segundo elemento importante en las declaraciones fuera de plazo

Una vez haya pasado el plazo pertinente para presentar la declaración, hay que  tener presente otro elemento fundamental en la Renta: si es Hacienda quien detecta el error o si es el propio contribuyente el que lo hace (y lo solventa). Habida cuenta de lo anterior, será más gravoso el primer escenario que el segundo.

A pagar o a devolver, el tercer factor

Cuando nos toca pagar a Hacienda

Si sale a pagar a Hacienda y es el contribuyente quien se percata de esto, se le aplicará un recargo que dependerá del tiempo que haya pasado desde que finalizó el plazo para presentar la declaración.

• Hasta tres meses de atraso: 5% de recargo. 
• Entre tres y seis meses: 10% de recargo.
• Entre seis a doce meses: 15% de recargo.
• Más de un año desde la fecha límite: 20% de recargo más intereses.

Si sale a pagar a Hacienda y es el propio fisco el que reclama el dinero, las sanciones serán más costosas. El recargo será de un 50% en caso de infracciones consideradas leves (cuando la base de la sanción sea inferior a 3.000€ y no haya ocultación). Si la infracción es grave (con ocultación) o muy grave (medios fraudulentos), el recargo puede llegar al 150%.

Cuando le toca a Hacienda devolver

Si sale a devolver y la declaración se presentó fuera de plazo, también debemos tener cuidado. En este caso, Hacienda nos devolverá la cantidad correspondiente pero nos puede imponer una multa de 200€ de forma general, aunque puede rebajarse en caso de presentar la Renta sin trabas y con celeridad.