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La manada de elefantes de China ya lleva más de 500 kilómetros
El grupo de 15 paquidermos comenzó su viaje hace un año y ya han recorrido más de 500 kilómetros. El lugar al que se dirigen, toda una incógnita.
A principios de este mes de junio conocimos la historia de una manada de elefantes que había abandonado una reserva natural en Xishuangbanna (China) buscando un nuevo hogar. Sin embargo, el grupo compuesto por 15 animales (seis hembras adultas, tres machos adultos, tres adultos jóvenes y tres cachorros) cuenta ya con un largo recorrido.
Fue hace ya un año cuando comenzaron su ruta por el país asiático, que les ha llevado a recorrer más de 500 kilómetros, atravesando poblaciones enteras. Su trayecto está siendo monitorizado 24 horas gracias al uso de drones, como confirma el científico español Ahimsa Campos-Arceiz a Antena 3.
Actualmente la manada está en la localidad de Yuki, aunque no todos: uno de ellos se separó del grupo y está a unos 17 kilómetros de la manada, según la televisión estatal CCTV. El resto está en dicha localidad, bien por esperar al animal restante o porque el clima es similar a su Xishuangbanna natal, según expertos citados por la cadena.
Teorías sobre su escapada
Los expertos tratan de buscar una respuesta válida al motivo que les ha llevado tan lejos, recorriendo una distancia cinco veces superior a lo habitual: 500 kilómetros en el suroeste de China, que equivale casi a la distancia que hay entre Madrid y Barcelona.
La teoría que barajan es que "van a otro sitio, pero no saben dónde van y están buscando un hábitat que les guste y sea apropiado". Las zonas en las que normalmente habitan, los bosques húmedos, son cada vez menos, por lo que se se ven atraídos por los cultivos humanos.
Esto genera el peligro de que se acerquen mucho a los núcleos de población. Para poder avisar de ellos, hay varios métodos. "Cuando los elefantes se acercan a un pueblo hay formas de avisar. Se cortan carreteras y se pide a la gente que no vaya a los cultivos", explica el experto. Mientras, a los vecinos no les importa que acaben con sus cultivos. "Podemos sembrar más el año que viene, pero si estos elefantes resultan heridos, no habrá más".