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Muere en la ruina sin saber que tenía una herencia de 700.000 euros

La mujer, de 49 años, vivió con la madre hasta que ésta falleció. Tras ello, recayó en el consumo de narcóticos y vivió durante años en la calle.

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Muere en la ruina sin saber que tenía una herencia de 700.000 euros

El pasado año falleció en Estados Unidos una mujer de Oregón que durante mucho tiempo había estado viviendo en la calle. Catherine Boone, de 49 años, no sabía que tenía una herencia sin reclamar de casi 900.000 dólares, algo que habría cambiado radicalmente su vida.

La historia ha salido ahora a la luz después de que su padre concediera una entrevista. La protagonista tenía un historial de problemas de salud mental y abuso de drogas. Durante años vivió con su madre hasta el fallecimiento de ésta, en 2016. Fue entonces cuando volvió a caer en el consumo de narcóticos, dijo su padre, Jack Spithill.

Trataron de dar con ella para tratar el tema de la herencia, a través de las redes sociales, el periódico local e incluso con un investigador privado, pero todo esfuerzo fue en vano. Tampoco se pudo dar con el paradero de los otros dos hijos biológicos. Así pues, en julio de 2019 un juez ordenó que los 884.407 dólares (unos 726.000 euros) que le correspondían fueran enviados al Departamento de Tierras de Oregón, encargado de gestionar el dinero no reclamado en caso de que los herederos no sean localizados o rechacen el pago.

Boone estuvo viviendo en las calles de la localidad de Astoria, donde solía acudir a un refugio local. En enero del año pasado se empezó a sentir mal, sufriendo problemas respiratorios, por lo que fue trasladada al hospital, donde falleció días después. Los que la conocían la describen como una persona "buena y especial", y no tienen claro si llegó a saber de la herencia o si no sabía como obtenerla.

Divorcio del padre

Cuando Catherine era una niña sus padres se separaron, aunque Spithill trató de mantener el contacto con ella pese a rehacer su vida. Sin embargo, reconoce su "incapacidad" para confesar los problemas mentales de su hija, alejándose así por su adicción. "En cierto modo la abandoné a causa de las drogas y no debería haberlo hecho", se lamenta.

Igualmente, el padre valora de forma crítica que ni el sistema judicial ni la Policía intervinieran para que su hija pudiera rehacer su vida. "Tiene que haber más personas por ahí, más como ella".

El dinero de la herencia

Mientras tanto, el Departamento de Oregón hizo entrega del dinero en octubre al representante personal del patrimonio de Cathy Boone, que desde entonces se encarga de identificar a las personas que tengan derecho a recibirlo.