El personal sanitario lleva más de un año en primera línea de combate contra la COVID-19, realizando una excelsa labor, muy aplaudida por los ciudadanos. Así, han adquirido un enorme protagonismo, hasta el punto en que casi todas las historias que nos llegan por su parte se hacen virales porque nos permiten conocer su lado más humano. La última de ellas, la ha contado Sergio Juan, sanitario del del Hospital Reina Sofía. A través de un hilo de Twitter ha narrado un sobrecogedor relato sobre cómo él y sus compañeros lograron salvar la vida de un niño de tres años que ingresó en coma.

“Nos comentan que tenía fiebre y la madre se lo ha encontrado que de repente perdía el conocimiento”, detalla el sanitario, quien destaca que la respuesta por parte de los profesionales del hospital fue inmediata: “Desde ese mismo momento todo el servicio de urgencias del hospital reina Sofía se vuelca en el paciente”. El niño había sufrido una convulsión febril, por lo que hubo que realizarle el ABCDE de la reanimación.

Tras la exploración, Sergio informa de que descubren que el pequeño tenía petequial, un sangrado en el interior de la piel, por lo que sospecharon que podría sufrir sepsis. Seguidamente, se le aplicó un“tratamiento antibiótico y empezamos a tratar la posible crisis febril”. “Sin respuesta tras 2 dosis de midazolan y una de Keppra”. Al no hacer efecto estas dos dosis de antibióticos, los sanitarios comenzaron a sospechar que el niño podía sufrir una meningoencefalitis.

Comprobando su estado en coma, “se decide intubar al paciente, nos costó dos intentos, y una vez se nos fue a bronquio derecho colapsando el pulmón izdo. (gajes del oficio) se retiró el tubo y arreglado. Se hizo TAC de urgencia que fue normal y se traslada al Miguel Servet”. Una vez trasladado a la UVI móvil del hospital, el pequeño ingresó en la UCI pediátrica.

Final feliz

Una vez finalizado su trabajo, Sergio se marchó a casa a descansar, mientras que sus compañeros trataron de salvar la vida del niño durante toda la noche. Al día siguiente, recibió la mejor noticia: “Hoy a las 16 h me manda un WhatsApp mi amiga de la UCI: ‘Álvaro está viendo dibujos animados’. Se me saltan las lágrimas”. Acto seguido, felicitó al todos sus compañeros por el trabajo que habían hecho.

Pero él no fue el único que se emocionó con la historia, ya que miles de personas compartieron su emoción en Twitter, que pronto se llenó de mensajes hacia los sanitarios: “Sois todos muy, muy grandes! Eslabones imprescindibles de esa cadena que permite que ese pequeño esté ahora mejor. Admiración total!”, escribía una usuaria. “Gracias por vuestro esfuerzo”, compartía otra.

Tras la repercusión que tuvo su historia, Sergio Juan agradeció y confesó que estaba “abrumado por todas las respuestas. No me da para mirarlas. Se me ha ido de las manos. El peque lo van a pasar a planta, de ya recuperado como un campeón. Es un meningo el causante de todo. Pendientes de saber el serotipo. Todo ha acabado genial”.