El 'plan B' de la Guardia Civil en la búsqueda de Anna y Olivia por el retraso del sónar
Las condiciones meteorológicas están complicando las labores de los expertos y la llegada del artefacto no se espera hasta el domingo.
Anna y Olivia desaparecieron en Tenerife el pasado 27 de abril junto a su padre, Tomás Gimeno. Tras un mes sin noticias sobre su paradero, los investigadores continúan buscando pistas que les puedan acercar al rastro de las niñas. Se trata de una intensa labor realizada por tierra, mar y aire.
Lo último que se había dado a conocer era el uso de un sónar para intentar obtener la máxima información sobre el fondo del océano. Sin embargo, las condiciones meteorológicas están complicando las labores de los expertos y la llegada del artefacto no se espera hasta el domingo, según ha explicado El Programa de Ana Rosa.
Retraso
El principal motivo que ha provocado este retraso se debe al mal estado del mar, ya que el buque que traslada el sónar salió ayer por la tarde de Cádiz y actualmente se encuentra cerca del Estrecho de Gibraltar. Sin duda, esto ha supuesto un jarro de agua fría y dilatará el rastreo del fondo marino.
Una tarea que se antoja de gran complejidad, dada la profundidad del mar en esa zona y ser suelo volcánico e irregular. Otro aspecto que complica más aún la situación es la amplitud del área a analizar, siguiendo el recorrido que Gimeno realizó en su primera incursión al mar en aquella noche del 27 al 28 de abril.
Repetidores telefónicos
Ante este panorama, la Guardia Civil ha decidido activar un Plan B: el rastreo de teléfono. Tal y como detalló el citado programa, los agentes siguen saliendo en patrullera junto a miembros de la Policía Judicial. Así, tratan de acotar el área de búsqueda que posteriormente tendrán que explorar el sónar y el robot. Para realizarlo, la Benemérita lo hace mediante los repetidores telefónicos que captaron la señal del móvil de Gimeno.