Ramadán 2021: ¿cómo afectan las restricciones y el toque de queda al calendario musulmán?
La comunidad musulamana comienza este 13 de abril el mes de abstinencia. Algunos de sus rezos se ven perjudicados por el toque de queda.
El Ramadán ha comenzado este martes, 13 de abril, en España. Una celebración que no cumple las mismas fechas en toda la comunidad musulmana en el mundo pero que, en nuestro país, se prolongará desde este martes hasta el próximo 12 de mayo. Un mes en el que más de 2.000 millones de personas musulmanas se abstendrán de comer y beber agua desde la salida del sol hasta su puesta, como marca a tradición.
Una costumbre cuyo objetivo es desarrollar la paciencia y la humildad, sabiéndose poner en el lugar de aquellos que no tienen dinero para poder comer, así como saber agradecer la vida que cada uno tiene. Además de esta abstención, el rezo es una parte fundamental del Ramadán que, con la pandemia del coronavirus y las restricciones actuales, podría verse perjudicado.
Es por ello que la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas (FEERI) ha emitido un comunicado en el que revela ciertos preceptos que deben cumplir los fieles no se pueden llevar a cabo por las medidas sanitarias, entre ellas, el toque de queda establecido en toda España. Por ello, a través de este texto al que ha tenido acceso Europa Press, pide a las administraciones autonómicas poder “acordar y coordinar las posibles aperturas y cierres excepcionales durante el sagrado mes de Ramadán” de los lugares de culto.
Incompatibilidad de horarios con los rezos
El Ramadán se caracteriza también por tener que cumplir con cinco rezos diarios: el ‘Fajr’, antes de la salida del Sol; el ‘Dhuh’, al mediodía; el ‘Asr’, durante la tarde; el ‘Maghrib’, durante la puesta del Sol; y el ‘Isha’, durante la noche. Sin embargo, el toque de queda pondría en riesgo el cumplimiento del primer rezo del día, en torno a las seis de la mañana, y los últimos de la jornada, coincidiendo con “la franja del toque de queda en algunos lugares de España”. Unos horarios que varían según en territorio en el que uno se encuentre pero que, a su vez, son “muy puntuales, que no se pueden adelantar ni atrasar”.
En vista de esta situación, FEERI ha pedido la flexibilización al Gobierno, comparando esta situación con el “cierto movimiento de personas por trabajos nocturnos que, a juicio de todos, no afecta en absoluto a la seguridad ciudadana general ni perturba el bienestar común”. Con esto, también han pedido que se facilite el acceso de la comunidad musulmana a los lugares de culto, eso sí, siempre “respetando las medidas de seguridad recomendadas y el protocolo sanitario establecido”.
Estricto cumplimiento de las medidas en las mezquitas
Sin embargo, el Gobierno no ha dado respuesta y los fieles tendrán que seguir todas las restricciones impuestas por la situación sanitaria. Además, en las mezquitas tiene que respetarse la distancia interpersonal y el uso de mascarillas en interiores, así como el aforo permitido en cada instancia. “Las Mezquitas también pueden realizar su función, sin alterar el orden público, ni el bienestar general”, añade el comunicado.