El pasado sábado 27 de marzo, Victoria Esperanza Salazar fue asesinada por cuatro policías mexicanos durante una brutal detención en la ciudad de Tulum, Quintana Roo. En los vídeos grabados por diversos testigos, se puede observar cómo los agentes arrestan de manera violenta a la mujer salvadoreña de 36 años, sin que se hayan revelado los motivos.

Tras rodearle para que no escapara, la tiran al suelo boca abajo al lado de un coche patrulla para esposarle. Tumbada con la rodilla de una policía sobre su espalda, Salazar pide ayuda a gritos e intenta levantar la cabeza para respirar hasta que queda inconsciente. Al darse cuenta, los efectivos levantan el cuerpo y lo meten en la parte trasera de otro vehículo policial. Durante el camino a comisaría, la mujer fallece por una “fractura en la parte superior de la columna vertebral, producida por la ruptura de la primera y segunda vértebra”, según ha revelado la Fiscalía General de Quintana Roo. Las lesiones coinciden con las “maniobras de sometimiento que se le aplicaron a la víctima durante el proceso de su detención y antes de fallecer”.

Estos trágicos sucesos han causado una notable indignación, como ocurrió con la cruel muerte del afroamericano George Floyd en 2020, también a manos de la Policía presuntamente. De hecho, el lunes comenzó el juicio del exoficial de policía, Derek Chauvin, acusado de asesinar hombre de 46 años. De acuerdo con los hechos, Floyd fue arrestado por intentar pagar con un billete falso de 20 dólares. Entonces, Chauvin se arrodilló sobre su espalda y cuello durante más de ocho minutos, ignorando las súplicas de la víctima, quien aseguraba que no podía respirar.

Los agentes han sido detenidos

La nota de la Fiscalía General también denunciaba que “la técnica policial de control corporal aplicada y el nivel de fuerza utilizado, se realizó de manera desproporcionada, inmoderada y con un alto riesgo para la vida, ya que no fue acorde con la resistencia de la víctima, lo que ocasionó una desaceleración con rotación del cuello, violándose con ello lo establecido en la Ley Nacional sobre el uso de la fuerza”.

Como consecuencia, ese mismo día, los cuatro policías involucrados en el asesinato de Salazar, tres hombres y una mujer, fueron detenidos y serán presentados ante un juez de control por su probable participación en el delito de “feminicidio”. “Con estas acciones, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo deja claro que no habrá impunidad y actuará con toda la fuerza de la ley en contra de quien o quienes atenten contra la dignidad y la integridad física de mujeres en la entidad”, concluye el comunicado.

Indignación mundial

“Mi hermana emigró de El Salvador hacia México buscando mejores oportunidades y un trabajo más digno para darles una mejor vida a mis sobrinas”, manifestó a CNN René Olivares, hermano de Victoria Salazar. Tanto su historia como su muerte han conmovido e indignado a todo el mundo a partes iguales. Los propios gobiernos de El Salvador y México han denunciado los hechos. Por una parte, el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, pidió “justicia” para Salazar: “Que a los que hicieron esto les caiga todo el peso de la ley”. Asimismo, aseguró que el Ejecutivo se encargará de cubrir la manutención y los estudios de sus dos hijas.

Mientras tanto, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, inauguró el lunes el Foro Generación Igualdad, una reunión mundial para defender la igualdad de género promovida por Naciones Unidas, con un mensaje sobre Salazar. “Quiero expresar mi pesar por un lamentable hecho, una mujer, Victoria Esperanza Salazar, fue brutalmente tratada y asesinada. Es un hecho que nos llena de pena, dolor y vergüenza. Decir a sus familiares, a las mujeres salvadoreñas, a las mexicanas, las mujeres del mundo, a todos hombres y mujeres que se va a castigar a los responsables, ya están en proceso de ser enjuiciados”, aseguró.

También diversas la Colectiva Feminista Tulum convocó se manifestó el lunes frente al Palacio Municipal para protestar por este homicidio. Además, personas de todo el mundo se han solidarizado con Salazar y han mostrado su enfado por lo ocurrido.