ACTUALIDAD

Alemania confirma el temor de su gran virólogo para Semana Santa

Christian Drosten alertó sobre el error que significaría declarar el fin de la pandemia pasada esta festividad y comenzar a flexibilizar las restricciones.

0
Alemania confirma el temor de su gran virólogo para Semana Santa

Christian Drosten es el virólogo más prestigioso de Alemania y hace unas semanas alertó del peligro que podría suponer para el país relajar las medidas anticipadamente: "Hasta pasada la Semana Santa, no podemos esperar mucha protección civil a través de las vacunas".

Debido a ello, consideró un error declarar el fin de la pandemia pasada esta festividad y comenzar a flexibilizar las restricciones: "Por el momento, el proceso de infección debe seguir regulado con restricciones de contacto. Si la política relaja las restricciones contra la COVID-19 demasiado pronto, la cantidad de infecciones en los grupos de edad no vacunados se disparará".

Temor ante un repunte

Ahora, las autoridades alemanas temen un repunte de contagios tras la Semana Santa similar al que ocurrió después de Navidad. Uno de los motivos se debe a que la cepa británica está extendiéndose rápidamente y ocupa el 50% del total de los contagios, tal y como señaló el Instituto Robert Koch de Virología (RKI).

"Los números de casos semanales de B.1.1.7 muestran una tasa de crecimiento muy constante y se han duplicado aproximadamente cada doce días durante siete semanas", comunicaba el RKI, cuyo jefe Lothar Wieler, admitió en relación a la Semana Santa: "Hay que evitar que el número de casos se vuelva a disparar".

Actualmente, la incidencia acumulada está incrementándose y se sitúa en 76,1 casos positivos por 100.000 habitantes en los últimos siete días. Asimismo, este sábado se han notificado 12.674 contagios y 239 muertes. En total, Alemania registra 2.558.455 infecciones y 73.301 decesos. 

Reapertura paulatina

Ante la buena evolución que tenía el país, la canciller Ángela Merkel y los líderes regionales consensuaron a principios de marzo una reapertura gradual de algunos comercios no esenciales, museos y otras instituciones culturales. Además, se establecieron varios niveles de desescalada en función de la incidencia acumulada existente en cada territorio.

Aunque en caso de rebasarse los 100 positivos por 100.000 habitantes en siete días, se volvería al nivel anterior de limitaciones. Después de varios meses de paralización en algunos sectores como la restauración, el ocio o la cultura, los dirigentes germanos decidieron rebajar la severidad de las medidas.