El extraño caso de Uzbekistán: un país en la era post-COVID
Diego González Rivas ha comprobado cómo la normalidad ha vuelto a Uzbekistán, territorio donde se ha alcanzado la inmunidad de rebaño.
Diego González Rivas es un cirujano gallego que ha comprobado esta semana cómo la normalidad ha vuelto a Uzbekistán. Se trata de un país donde sus habitantes no utilizan mascarilla, se reúnen en bares o restaurantes y celebran fiestas sin riesgo de posible infección.
Según declaró a EFE antes de regresar a España, la situación vivida en un territorio donde viven 33 millones de personas "ha sido una sorpresa, muy curioso y muy extraño. Me di cuenta de que aquí no hay coronavirus, pero ha sido muy chocante vivir esta situación y me ha costado dos días adaptarme".
Tal y como apuntó González Rivas, los ciudadanos uzbekos se encuentran libre de coronavirus por "la inmunidad de rebaño. He hablado con mis colegas y ellos creen que la razón de que no haya ningún problema es haber llegado al 60 o 70% de contagios en la población".
Golpeado por la pandemia
Pese a que ahora realizan vida prácticamente normal, durante marzo y abril de 2020 el país fue muy golpeado por la pandemia. La situación llegó a ser crítica, tanto por el número de infectados como de muertes, aunque a partir de septiembre se logró alcanzar la inmunidad grupal existente en la actualidad.
El médico español explicó en EFE que la experiencia fue "alucinante, porque no conozco ningún otro país que lo haya conseguido así de esta manera. La gente ya no tiene la infección y en los hospitales no hay ingresos, por lo que no existen casos".
Cuando planeó la estancia en la capital uzbeka, no pensó que fuera a desarrollarse de esa forma: "Llama mucho la atención y la verdad es que los primeros días no me lo creía, incluso llevaba la mascarilla por miedo, pero mis colegas médicos me decían que me la quitase, que no era necesaria; finalmente me la quité".
Control aeroportuario
Otro de los aspectos clave para el cirujano está relacionado con el férreo control para entrar en el país, ya que además de exigir una PCR en origen, al llegar al aeropuerto "hay un dispositivo de gente que te hace un nuevo test antes de entrar en el propio país. Después de una hora de espera te dan el resultado y si es negativo puedes entrar".
Tras alcanzar la inmunidad de rebaño, las autoridades de la nación no tienen marcada entre sus prioridades conseguir la vacuna o planificar su administración: "Supongo que sí lo harán más adelante. Al tener a la población con suficientes anticuerpos consideran que está protegida", afirmó el doctor en el citado medio.