Cuando compramos un coche nuevo debemos pagar un porcentaje su precio que se fija por tramos, en función de las emisiones de CO2. Cuanto mayor sea el consumo del vehículo y, por tanto, los gases que emite, más alto será el tipo de impuesto. Hasta el 30 de diciembre de 2020 convivían dos normas para medir estas emisiones, NEDC y WLTP, pero a partir del pasado 1 de enero, se ha impuesto la segunda, que utiliza pruebas que se acercan más a la conducción real y que conlleva valores más altos a los que arrojaba el anterior sistema, con lo que el consumo homologado de la gran mayoría de los coches subió.

Así, los vehículos que estaban exentos de pagar el impuesto de matriculación, pero tuvieran unas emisiones homologadas muy próximas al siguiente tramo, han podido saltar de grupo en este 2021 y tener que pagar un 4,75%. El incremento se notará especialmente en los vehículos más caros, mientras que a algunos no les afectará. Para saber el porcentaje que deberemos pagar si queremos adquirir un coche nuevo, se han establecido varios grupos:

- Los vehículos con emisiones inferiores a 120 g/km están exentos de pagar.

- Los vehículos que emitan entre 121 g/km y 160 g/km pagarán un 4,75%.

- Los vehículos que emitan entre 160 g/km y 200 g/km pagarán un 9,75%.

- Los vehículos con emisiones superiores a 200 g/km pagarán un 14,75%.

La recaudación por este impuesto se desplomó en enero

Los primeros datos sobre la recaudación del impuesto de matriculación desde la entrada en vigor de la nueva norma no son optimistas, ya que ha caído en enero un 16,32% respecto al mismo mes del año pasado, hasta los 34,33 millones de euros, frente a los 41,02 millones, casi 6,70 millones menos que en enero de 2020, al desplome de más de la mitad en las ventas. En cambio, la cuota media a ingresar, que ha sido de 792 euros, casi se ha duplicado (94,11%), según el avance de datos que figura en la página web de la Agencia Tributaria.

El número total de ventas de vehículos, tanto los que pagan el impuesto como los que están exentos, ha caído un 56,88% en enero respecto al mismo del año pasado, pasando de 100.494 a 43.327. De los vehículos que se matricularon en enero de 2020, un 67,9% (68.277), estuvo exento de pagar el impuesto, al arrojar la medición unas emisiones iguales o menores a los 120 gramos por kilómetro, mientras que en el primer mes de 2021 han sido sólo 15.402 vehículos los que no han tenido que pagar el impuesto, el 35,5% del total.

La reducción del número de vehículos exentos del impuesto ha incrementado el porcentaje de los que pagan un impuesto de matriculación del 4,75% en la Península y el 3,75% en Canarias. Estos han pasado de suponer el 26,9% en enero de 2020 al 54,5% en el mismo mes de este año, pese al descenso en la cifra absoluta de vehículos a los que se aplican estos tipos, que ha caído de 27.029 en enero de 2020 a 23.599 en el mismo mes de 2021, unos 3.000 menos.

También ha subido el porcentaje de los que pagan un impuesto del 9,75% en la península y del 8,75% en Canarias, que ha pasado del 3,6% del total al 6,8%, a pesar de producirse también una caída en el número total de estos vehículos, que han pasado de 3.587 en enero de 2020 a 2.955 en enero de 2021. Lo mismo ocurre en el caso de los que tienen un tipo del 14,75% en la Península y del 13,75 % en Canarias, que fueron en enero de 2020 el 1,6% del total y en el mismo mes de este año el 3,2%, pese a que también el número de vehículos ha disminuido de 1.601 a 1.371, 230 menos.

Por tipos de combustible, un 60,9% de los vehículos que han pagado el impuesto de matriculación en enero es de gasolina, con una contribución del 58,6% a la recaudación, frente al 61,1% que representaron en enero del año pasado, en que su contribución fue del 56,5%. En el caso del diésel representaron el 35,9% de los vehículos que pagaron el impuesto, que aportaron el 41% de la recaudación total, cuando en enero de 2020 fueron el 35,8% de todos los vehículos sujetos al impuesto que aportaron el 43,3% de la recaudación.