Un millón de mascarillas al mes: el gran logro de un valiente proyecto asturiano
Con una inversión de 800.000 euros, un grupo de empresarios asturianos ha puesto en marcha una planta que da trabajo a 25 personas y fabrica uno de los equipamientos sanitarios imprescindibles en plena pandemia.
De las épocas de crisis también surgen oportunidades. La clave está en asumir el riesgo con valentía, presentar un proyecto viable y lanzarse a la aventura. Algo que un grupo de empresarios ha tenido claro desde el primer momento y que ha dado como resultado la génesis de Fortia, una empresa de capital 100% asturiano que trabaja con tecnología de última generación para ofrecer un producto imprescindible con demanda nacional e internacional en plena pandemia: mascarillas.
‘Lo que hacemos, lo hacemos bien’ reza su claim, que habla de las excelencias y cualidades de una empresa que pretende ser sostenible y que ha estas alturas da empleo a 25 personas de la zona de Argame, una parroquia del concejo asturiano de Morcín, en cuyo polígono industrial se ubica la planta que permite fabricar un millón de mascarillas al mes.
Son las mascarillas higiénicas, mascarillas quirúrgicas y mascarillas FFP-Covid19, de protección individual no reutilizables y destinadas a todos los sectores. Como no podía ser de otra forma, La empresa cuenta con las más rigurosas normas de homologación y certificación, ofreciendo mascarillas altamente eficaces como herramienta para controlar la propagación del SARS.CoV-2.
"Las cosas van bien, cada vez tenemos más clientes y fabricamos a buen ritmo. Estamos casi al máximo de nuestras posibilidades. Con los niveles de producción que tenemos en estos momentos podemos abastecer a la región, también a comunidades limítrofes e incluso pensar en la exportación a otros países”, explica en los micrófonos de SER Gijón, Belén Fernández, responsable de producción.
Más allá de la pandemia
Además, en el seno de la compañía existe el convencimiento de que hay mucha más vida más allá de la pandemia. "Es el momento adecuado para crecer aunque hay que medir bien las inversiones y los tiempos porque todo es complicado. Nosotros esperamos que haya futuro al margen del coronavirus”, añade Fernández, consciente de que se han sentado las bases para que el proyecto tenga recorrido.
Y no es para menos ya que lo principal es contar con un buen producto, algo que en esta ocasión está fuera de toda duda. Fabricamos mascarillas FFP Covid 19, quirúrgicas tipo I, tipo II, y IIR e higiénicas no reutilizables. Empleamos las más innovadoras fibras, y las fabricamos con la última tecnología en las más avanzadas máquinas, y bajo exhaustivas exigencias de calidad”, concluye la responsable de producción de Fortia.