Médicos de Yepes (Toledo) encuentran un tratamiento eficaz contra la COVID-19
La terapia con antihistamínicos ha mostrado eficacia en personas mayores de 80 años y no ha habido que lamentar muertes ni efectos secundarios.
‘Antihistamínicos y azitromicina como tratamiento para COVID-19 en la atención primaria de salud: un estudio observacional retrospectivo en pacientes ancianos’, así se titula la investigación de un grupo de médicos de Yepes (provincia de Toledo), cuyo autor principal es el doctor Juan Ignacio Morán Blanco, que ha sido publicado recientemente en la revista médica ‘Pulmonary Pharmacology & Therapeutics’, y que tiene como resultado la eficacia de un nuevo tratamiento contra la COVID-19.
La terapia que plantean los médicos de Yepes reduce los fallecimientos y los ingresos en UCI en pacientes de riesgo frente al coronavirus. Los resultados se han comprobado tras llevar a cabo el estudio entre los meses de marzo y abril de 2020, cuando comenzó la crisis sanitaria en España.
Un estudio con 84 pacientes de dos residencias de ancianos
84 pacientes de elevada edad, residentes en dos centros de ancianos de Yepes, con posible infección por coronavirus, y 64 de sus cuidadores, fueron sometidos al tratamiento precoz con los antihistamínicos dexclorfeniramina, cetirizina y loratadina. Además, los médicos añadieron también azitromicina en 25 casos asintomáticos.
Los resultados del estudio demostraron que ninguno de los pacientes tratados con los antihistamínicos desarrolló una enfermedad grave, ni requirió ingreso hospitalario, ni tampoco tuvieron efectos secundarios relacionados con el tratamiento.
Ni muertes, ni ingresos hospitalarios ni efectos secundarios
“La edad media de nuestra población fue de 85 años y el 48% tenía más de 80 años. No se informaron ingresos hospitalarios, muertes ni efectos adversos de medicamentos en nuestra población de pacientes. A finales de junio, el 100% de los residentes tenían serología positiva por COVID-19. Aunque se necesitan ensayos clínicos para determinar la eficacia de los fármacos en el tratamiento de COVID-19, este análisis sugiere que el diagnóstico de atención primaria y el tratamiento con antihistamínicos, más azitromicina en casos seleccionados, pueden tratar COVID-19 y prevenir la progresión a enfermedad grave en pacientes de edad avanzada”, señalan los autores del estudio.
“El tratamiento precoz de los pacientes sintomáticos COVID-19 con antihistamínicos y azitromicina, y la administración de antihistamínicos en pacientes asintomáticos y de alto riesgo, contactos cercanos y familiares, tuvo excelentes resultados en nuestra población reduciendo la tasa de letalidad, los ingresos hospitalarios y los ingresos a UCI en esta población anciana, independientemente de la edad del paciente y los factores de riesgo”, concluyen los expertos en las conclusiones de su estudio.
“No se nos ha muerto ningún paciente”
“Este tratamiento lo aplicamos en un inicio de brote en la residencia de mayores de Yepes y el resultado fue que pudimos curar a los afectados en pocos días. Cuando se realizaron test masivos, vimos que los pacientes habían pasado la enfermedad y del total, solo cinco habían pasado síntomas, lo que nos hizo sospechar que estos antihistamínicos curan, a nosotros no se nos ha muerto ningún paciente, a nosotros nos ha funcionado”, ha explicado Ignacio Morán para el informativo matutino Castilla-La Mancha Despierta de Castilla-La Mancha TV.
“Hay que abrir los ojos porque puede haber medicamentos económicos que pueden funcionar en algunos casos. Con este tratamiento evolucionan bien los pacientes con síntomas y los contactos estrechos”, concluye el médico para Castilla-La Mancha Despierta.