La Acebeda, único pueblo de Madrid libre de COVID
La localidad madrileña, con un censo de 84 habitantes, tiene cerrados todos los lugares de ocio para evitar reuniones o visitas de forasteros.
La incidencia acumulada de coronavirus se ha disparado en la Comunidad de Madrid hasta alcanzar este viernes los 904,24 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos catorce días. De esta forma, se posiciona por encima de la media nacional (828,57) y solo es superada por seis comunidades. Además, en las últimas 24 horas detecto 4.626 nuevos contagios y en los últimos siete días han fallecido 120 personas.
Estas cifras hacen pensar que la COVID-19 invadido todos los rincones de la región. Pero no. Todavía queda un lugar al que no ha llegado: La Acebeda. “¿Cómo puede ser esto?”, preguntarán algunos. “¡Porque no hay nadie!”, exclama Jorge, técnico de limpieza y vecino de este pueblo situado norte de la provincia, en la sierra de Somosierra. El censo refleja que la localidad tiene 84 habitantes, pero, en realidad, nadie sabe decir con exactitud cuánta gente vive allí.
“Aquí vive sobre todo gente mayor: yo mismo tengo a mi padre y mi madre, de 86 y 83 años, con varias patologías, y tengo mucho cuidado”, ha contado a El Confidencial Jorge, que lleva cinco meses sin ver a su novia: “Ella vive en Madrid y no se atreve a venir ni yo a ir. Cuando hemos quedado ha sido siempre haciendo test primero”.
Un pueblo sin vida
Antes de que el coronavirus comenzara a hacer de las suyas en nuestro país, esta localidad madrileña alojaba turistas por su ambiente natural. Pepi tiene tres casas rurales que solían llenarse el fin de semana durante todo el año. Actualmente, en cambio, solo tiene alquilada una a una pareja de la capital que ha elegido teletrabajar en un ambiente más tranquilo, cerca de la naturaleza. “Estas casas rurales son para que vengan diez o doce personas, y ahora mismo no puede juntarse tanta gente. Lo que he alquilado este año ha sido sobre todo para teletrabajar”, explica.
Así, desde marzo, apenas hay señales de vida humana en este pueblo. “La gente no se arriesga, no sale de sus casas para nada”, dice Jorge. De hecho, la conexión con el exterior queda casi exclusivamente limitada a los camiones de reparto de supermercados de la zona, ya que en La Acebeda no hay tiendas. Hay que hacer la compra en el cercano pueblo de Buitrago de Lozoya, que tiene una incidencia de 604 contagios por cada 100.000 habitantes.
Además, todos los lugares donde podían reunirse los vecinos permanecen cerrados, incluido el bar “de toda la vida”, que clausuró hace unas semanas cuando visitantes comenzó a recibir visitantes que procedían del puerto cerrado de Navacerrada. “Como la gente no tenía cuidado ni respetaba las medidas, el dueño decidió cerrarlo para protegernos a todos, ha habido mucha responsabilidad”, comentan los vecinos Paco y Consuelo.
Temen un “aluvión de visitas”
La escasa población no es el único factor que hay mantenido libre al pueblo de contagios, según señala Pepi: “Aquí el aire es muy sano, por eso no nos contagiamos. ¡Y el agua de la fuente, que es sanísima, hasta medicinal!”. También ha influido la poca afluencia de personas forasteras. “Sí hay mucho dominguero, pero viene a pasear, a hacer rutas, no se quedan por el pueblo”, concreta la mujer. También han llegado vecinos jubilados que se sentían más seguros. “Nosotros vivimos en Madrid. Vinimos en mayo y luego decidimos quedarnos hasta que bajase. Pero como no baja, aquí seguimos. Ya creo que volveremos cuando nos pongan la vacuna, porque vendrán aquí a ponérnosla, ¿verdad?”, revela Justo, otro vecino.
El Ayuntamiento, en cambio, prefiere no promocionar qué es lo que ha mantenido al pueblo libre de COVID porque podría atraer a curiosos que importaran el virus: “La publicidad de esto puede provocar un aluvión de visitas al pueblo, y con ello un incremento de la posibilidad de contagios”, ha respondido a El Confidencial por correo la alcaldesa.