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Día negro en Reino Unido: registra 1.325 muertes, su cifra más alta desde que comenzó la pandemia

Las autoridades sanitarias han notificado 68.053 casos positivos, que supone también el total diario más elevado hasta la fecha.

Día negro en Reino Unido: registra 1.325 muertes, su cifra más alta desde que comenzó la pandemia
ANDY RAIN EFE

Viernes negro en Reino Unido. Las autoridades sanitarias del país han registrado 1.325 nuevas muertes por coronavirus, su cifra más alta desde que comenzó la pandemia. Asimismo, se han notificado 68.053 positivos, que supone también el total diario más elevado hasta la fecha.

Pero la situación podría empeorar, tal y como anunció en Sky News un portavoz del Servicio de Salud Pública (PHE, por sus siglas en inglés) británico: "Podemos esperar que el número de muertos siga aumentando hasta que detengamos la propagación".

Permanecer en casa

Por este motivo, el doctor William Welfare, director de la respuesta contra el coronavirus en el PHE, solicitó a los ciudadanos quedarse en casa siempre que sea posible y advirtió que "aproximadamente 1 de cada 3 personas que tienen coronavirus no tienen síntomas y podrían estar propagándolo sin darse cuenta".

Al borde del colapso en Londres

Sadiq Khan, alcalde de Londres, ha alertado que los hospitales de la capital británica pueden verse pronto colapsados ante el incremento sustancial de pacientes con coronavirus: "Si no tomamos medidas inmediatas ahora, nuestro servicio nacional de salud podría verse superado y más gente morirá".

Más de 1.000 casos por cada 100.000 habitantes

Según detalló el jueves el Health Service Journal, incluso si el número de pacientes con coronavirus aumentase siguiendo las proyecciones más bajas, para el 19 de enero habría un déficit de 2.000 camas de cuidados generales e intensivos en los hospitales de Londres. Actualmente, el número de positivos en la urbe supera ya los 1.000 por cada 100.000 habitantes.

Ayuda gubernamental

Khan subrayó la urgencia de la situación y se mostró esperanzado en obtener ayuda del Ejecutivo de Boris Johnson. Debido a este motivo, declaró la propagación del patógeno como "incidente mayor", requisito indispensable para recibir respuesta de varias agencias gubernamentales.