“Las UCI están llenas y no estamos preparados para una tercera ola”
El presidente de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias ha advertido del estado de las UCI y del riesgo ante una tercera ola.
El presidente de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICUC), Ricard Ferrer, ha advertido de que las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) están todavía llenas y que el sistema no está preparado para afrontar una tercera ola de contagios por coronavirus.
Según el último boletín del Ministerio de Sanidad, publicado el pasado viernes, hay 2.777 pacientes en las UCI del país, lo que supone una ocupación del 28,44% solo con pacientes infectados por coronavirus. La situación varía entre comunidades autónomas. Mientras La Rioja tiene una ocupación del 56,67%, Canarias solo ha ocupado un 9,71%. Sin embargo, 11 de las 17 comunidades y 2 ciudades autónomas tienen datos de ocupación superiores a la media nacional.
En este sentido, Ferrer, que además es el jefe del Servicio de Medicina Intensiva en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, ha añadido que las camas UCI “son recursos muy disputados”. La necesidad de camas durante las dos olas de la enfermedad ha obligado a los hospitales a habilitar espacios nuevos en los que ingresar a pacientes críticos.
Falta de profesionales
El presidente de los médicos de UCI ha lamentado la falta de profesionales que existe en el sistema sanitario. “No encontramos médicos intensivistas en el mercado laboral y, por ello, hemos tenido que recuperar a médicos jubilados”, ha añadido.
Para Ferrer, el problema no reside en la formación de profesionales, sino en los bajos salarios en comparación con otros países europeos. Para solucionarlo, el médico propone reforzar el proceso de formación y “detener el flujo de profesionales que se van”.
Continuidad en la actividad hospitalaria
El pasado 3 de noviembre, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad (CCAES), Fernando Simón, señaló que la mayoría de comunidades no habían tenido que suspender su actividad hospitalaria.
En esta misma línea, Ferrer ha confirmado que los hospitales grandes sí han podido compatibilizar la presencia de pacientes infectados por coronavirus con las necesidades del resto de enfermos, aunque algunos centros de menor tamaño “sí han tenido que suspender intervenciones quirúrgicas”. “Poder atender todas las enfermedades ha sido un gran éxito respecto a la primera ola”, ha recalcado.
Desescalada y tercera ola
Por último, Ferrer ha pedido que se haga “con cautela” la desescalada, porque “las UCI están aún llenas y la movilidad supone un riesgo, no solo de contagios, sino porque aumenta la probabilidad de tener accidentes de tráfico y, por lo tanto, la demanda de camas”.
De hecho, el médico ha destacado el aumento de pacientes con traumatismos craneoencefálicos durante la segunda ola. “Debemos ser muy cautelosos con el virus y con las demás enfermedades”.
“Si hubiera una tercera ola inminente tendríamos que dejar de atender a algunos pacientes en las Unidades de Cuidados Intensivos. Aún tendrán que pasar dos o tres semanas para que la presión asistencial disminuya y la situación deje de ser crítica”, ha concluido.