El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha explicado hoy que el Gobierno espera recibir las primeras dosis de la vacuna contra el coronavirus a principios de 2021 o “a finales de este año si las cosas van muy bien”.

Esta afirmación se ha producido en el seno de una conferencia telemática organizada por la agencia Intermèdia Comunicació. En ella, el ministro ha asegurado que, por mucho que España cuente con vacunas a principio de año, “habrá que convivir con el virus hasta mayo”, ya que harán falta entre tres y cuatro meses para que haya una parte de población inmunizada suficientemente grande como para que podamos empezar a ganarle la partida al virus. Hasta entonces, “habrá que convivir con el virus”, ha señalado Illa.

“La situación habrá cambiado sustancialmente en el segundo trimestre del año que viene, pero es difícil pronosticar sobre un virus debido a la inestabilidad que genera y ha generado”, ha asegurado.

Seguridad de la vacuna

El ministro de Sanidad ha insistido en la importancia de la coordinación entre los Gobiernos europeos para negociar una distribución equitativa de vacunas y el compromiso de que todas las que se administren hayan garantizado su seguridad y eficacia.

“No se administrará ninguna vacuna que no sea segura y eficaz. Por mucho que se haya ido muy rápido, nunca se habían movilizado tantos recursos como hasta ahora para conseguir una vacuna. El marco regulatorio es estricto y preciso”, ha subrayado Illa.

Negacionistas

Respecto a las actitudes adoptadas por las personas que niegan la enfermedad o que se posicionan en contra de la administración de la vacuna, el ministro ha manifestado la importancia de hacer frente a estas actitudes.

“No estamos hablando de discusiones más o menos entretenidas sobre si el hombre llegó a la luna. Estamos hablando de cuestiones que deben ser creías porque afectan a la vida de las personas. Un alto porcentaje de las personas que contraen la enfermedad están falleciendo”, ha defendido.

Además, el ministro ha condenado las protestas violentas producidas durante el fin de semana en ciudades como Madrid, Barcelona o Logroño. “Estas protestas, que creo que se deben a una fatiga pandémica, no ayudan en nada y están fuera de lugar”, ha expresado.

Confinamientos domiciliarios

Por último, Illa ha manifestado que el Gobierno descarta los confinamientos domiciliarios en los próximos días porque aún se tiene que valorar si las medidas recientemente impuestas han tenido éxito y, para ello, hacen falta 10 o 15 días.

“No podemos entrar en una competición para ver quién toma la medida más dura. Hay que tener templanza y esperar el tiempo necesario para ver si las últimas restricciones tienen efecto”, ha concluido.