Un investigador del CSIC anuncia cuándo llegarán las vacunas españolas
Luis Enjuanes ha revelado que en España hay alguna vacuna "muy prometedora" y que próximamente se pasará a los ensayos en animales humanizados.
Luis Enjuanes, investigador del CSIC que trabaja en el desarrollo de una vacuna contra la COVID-19, ha vaticinado en una entrevista con Efe que los primeros prototipos de vacunas llegarán a España antes de final de año, pero aún sin la aprobación de las agencias reguladoras de los medicamentos. Para que esta llegue, habrá que esperar todavía al primer o segundo trimestre de 2021, ha concretado. Esto mismo ha comentado unas horas antes en COPE Carlos Estévez, investigador adjunto de la vacuna de Oxford: “Una cosa es que la vacuna esté manufacturada, y otra es que haya unos resultados de un ensayo clínico que avalen su eficacia y seguridad a la hora de administrarla en la población”.
No obstante, Enjuanes, que ha participado en un curso de la UNED de Tudela sobre la COVID-19, no descarta que las agencias reguladoras de los medicamentos autoricen este mismo año la administración de algunas dosis en aquellas personas que están más expuestas a contraer el virus, como los sanitarios.
Siete vacunas en fase final
El científico, que dirige el laboratorio de coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CNB-CSIC), ha revelado que en este momento hay siete vacunas en fase 3. De las que se están desarrollando en España, ha querido resaltar la de su compañero en el laboratorio del CNB-CSIC, el profesor Mariano Esteban, que es la más adelantada y a la que ha calificado como “muy prometedora”. Según ha detallado, este fármaco presenta dos importantes ventajas. Por una parte, que el vector viral para espesar el antígeno es "muy potente” y suele dar una respuesta inmune muy elevada. Por otra, que “el poxvirus atenuado ya se ha probado en muchos otros países y se puede hacer rápidamente”.
Próximamente tienen previsto realizar pruebas de protección en ratones transgénicos humanizados (susceptibles al contagio) y a finales de año harán ensayos en macacos para llevarlos a cabo en humanos en la primera parte del próximo año. De esta forma, si todo va bien, la vacuna de Esteban estará disponible en el segundo trimestre de 2021, mientras que la del equipo que dirige Enjuanes, compuesto por catorce personas, tardará un poco más en ver la luz, ya que, en principio, no la tendrán lista hasta finales del próximo año.
Su vacuna tardará más, pero será mejor
“Llegaremos más tarde, pero lo haremos con una vacuna más adecuada y potente”, ha subrayado el virólogo, que ha explicado que su vacuna está basada en el propio virus y su administración es intranasal, en lugar de intramuscular. “No vamos tan avanzados porque el vector viral es novedoso y nos van a exigir más pruebas para demostrar su seguridad. Además, debemos resolver otros problemas que el equipo de Esteban no ha tenido porque su vector viral, un virus derivado de la viruela, ya lo habían aplicado en otros siete virus”, ha remarcado.
La cualificación del equipo de Enjuanes está contrastada, ya que fue el primer laboratorio en el mundo en conseguir un genoma sintético de los coronavirus. Además, pese a su reducido tamaño, si se compara con las 650 personas que disponen algunas compañías norteamericanas, es capaz de completar las primeras fases de desarrollo de una vacuna sin excesivos problemas.
Las complicaciones surgen cuando se trata de realizar ensayos clínicos, en fase 3 sobre todo, unas pruebas que tienen un coste que oscila entre los 40 y 60 millones de euros. Por esta razón, el CSIC ha apostado por la creación de un consorcio en el que participan compañías españolas y extranjeras (también está abierto a inversores), para poner en funcionamiento una fábrica de vacunas en España. En esta línea, el virólogo ha resaltado la importancia de que España invierta en investigación pensando en clave de futuro: “Nuestras autoridades científicas e industriales están tratando de establecer esta tecnología y que quede para después. No tenemos que olvidar que epidemias va a haber siempre y para hacerles frente debemos tener nuestras propias fábricas de vacunas”.
“Son planes de estrategia nacional", ha continuado el virólogo, quien ha estimado que, "igual que se compran aviones, barcos y equipo militar para la defensa de nuestro país porque es necesario, debemos preparar nuestro sistema sanitario en general y también para la fabricación de fármacos que son estratégicos”.
Anima a cumplir las recomendaciones sanitarias
Mientras llega la ansiada vacuna contra la COVID-19, el virólogo ha recordado la importancia de que la gente siga utilizando la mascarilla porque “puede evitar hasta el 80 % de las infecciones. En otros hemisferios que van desfasados con el nuestro se ha demostrado que se ha reducido el impacto de la gripe. Ha habido menos pacientes que han sufrido gripe, hasta para eso ha servido la mascarilla”.
Así, se ha mostrado crítico con aquellas personas que todavía son reticentes a cumplir las normas de prevención: “Es absolutamente impresentable, se trata de un porcentaje pequeño, pero resulta muy perjudicial. Nuestro laboratorio está en la Universidad Autónoma y lamento profundamente que, cuando voy a comer a la cafetería del campus, que está al aire libre, de 50 personas sólo una lleve puesta la mascarilla”.