Una de las técnicas de robo más empleadas por los ladrones para entrar en las viviendas es el método del 'resbalón'. Para ejecutarla, se ayudan con tarjetas de crédito o radiografías, que permiten abrir la puerta sin necesidad de forzarla ni provocar ningún tipo de ruido. De ahí adopta su nombre, ya que los delincuentes simplemente deslizan la lámina de plástico entre el marco de la puerta y el pestillo o resbalón.

Actualmente, existe mayor facilidad para adquirir materiales específicos para realizar este procedimiento. Así, los asaltantes están especializándose y perfeccionando cada vez más esta técnica y compran láminas muy finas para alcanzar su propósito delictivo.

Hay que cerrar siempre con llave

Por ello, la Policía ha querido lanzar un recordatorio a la ciudadanía a través de su perfil de redes sociales y ha mostrado el truco más efectivo para evitar la visita inesperada de los ladrones: cerrar siempre con llave al salir del domicilio.

De esta forma, el cerrojo hace tope con la lámina e imposibilita que se pueda deslizar el plástico para abrir la puerta. Además, los agentes han insistido en la necesidad de cerrar con llave aunque se vaya a salir "un segundito", debido a la simplicidad y rapidez con la que se lleva a cabo este recurso por parte de los ladrones.