Nuevo exceso de mortalidad en España, con 2.540 fallecimientos no esperados en agosto
Desde que comenzó la pandemia de la COVID-19, nuestro país ha registrado 43.556 muertes más de las previstas al analizar la tendencia de años anteriores.
Los datos que está dejando la COVID-19 en España son devastadores. La pandemia le ha costado la vida a más de 29.000 personas en nuestro país. Esto ha provocado que el número de muertes totales por diferentes causas supere con creces las previsiones realizadas a partir de la tendencia apuntada en años anteriores.
Según refleja el Centro Nacional de Epidemiología en su último informe de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo), en España entre el 10 de marzo y el 9 de abril, cuando más fuerte golpeaba la COVID-119 a causa del desconocimiento y la falta de recursos, se incrementó un 64,3% la mortalidad. Hubo 43.556 muertes más de las esperadas. Después, coincidiendo con el confinamiento, esa cifra descendió hasta situarse en parámetros prácticamente normales, con pequeños picos de subida.
Sin embargo, a finales de julio, a medida que fueron aumentando los brotes y los contagios en gran parte del país, el porcentaje volvió a subir, no de manera espectacular, pero sí considerablemente. Del 27 de julio al 15 de agosto hay un exceso de 2.540 fallecidos. En alguna ocasión la curva ha crecido en España debido a los efectos de una ola de calor. Pero este no es el caso. Desde el 13 de marzo al 26 de agosto hay 44.690 defunciones más de las que estaba previstas.
Las mujeres, más afectadas
Las conclusiones que se obtienen de MoMo es que “se han producido 2 periodos de exceso de mortalidad por todas las causas a nivel nacional: del 10 de marzo al 09 de mayo y del 27 de julio al 15 de agosto”, según explica el informe. En el primer periodo el exceso es parecido en mujeres (66%) y en hombres (63%), y se concentra en las personas mayores de 74 años (74%), seguido del grupo de edad entre 65 y 74 años (53%). En el segundo periodo aumenta la diferencia de exceso entre mujeres (18%) y hombres (10%), volviendo a ser superior en ellas. Además, el exceso de muertes vuelve a concentrarse en los mayores de 74 años (15%), como es habitual.
A nivel de Comunidades Autónomas, se han observado excesos de mortalidad en todas ellas. Algunas con un periodo de exceso y otras con dos o, incluso tres, como es el caso de Madrid y la Comunidad Valenciana. Todas ellas tienen en común que el exceso de mortalidad se concentra también en los grupos de edad de mayores de 74 y entre 65 y 74 años. Solo Ceuta y Melilla no han experimentado ningún exceso.