Cuando la situación epidemiológica empeora por días en Europa, China empieza a recobrar la 'antigua normalidad', aquella que existía antes de la llegada de la pandemia. El país en el que se originó el virus ha anunciado que "han conseguido doblegarlo".

China se acerca a la 'normalidad'

Esta afirmación llega después de que las autoridades chinas comunicaran este domingo solo 12 nuevos casos, todos ellos importados, y ni uno solo de origen local desde hace varias semanas. Por este motivo, el gigante asiático ha decidido abrir los colegios y permitir la celebración de grandes eventos. Además, en Pekín ya no es obligatorio el uso de mascarillas ni la distancia social. 

El portavoz del Ministerio de Exteriores, Zhao Lijan, ha resaltado el éxito de esta gestión frente a los países occidentales, que deberían fijarse más en China para superar la pandemia. A pesar de ello, todavía siguen vigentes algunas medidas: limitación de aforo en cines y restaurantes, toma de temperatura en los accesos a lugares públicos e, incluso, la cartilla electrónica que informa de si la persona está sana o no.

Pocos fallecidos entre una población tan grande

El país oriental suma solo 4.634 fallecidos  y unos 85.000 contagiados entre una población que supera los 1.4 millones de habitantes. Estas cifras llevan siendo cuestionadas desde hace varios meses, aunque algunos expertos apoyan que con un régimen dictatorial es mucho más sencillo que se cumplan todas las medidas que se toman desde las autoridades.

Por lo tanto, el primer país que alteró su normalidad por la aparición de la COVID-19, ahora es el primero que se acerca a la 'antigua normalidad' después de más de ocho meses de estrictas medidas de precaución.