La necesidad de utilizar mascarillas a diario ha provocado que muchas personas hayan optado por fabricar estos elementos de protección a partir de piezas de tela. Por ello, Simon Kolstoe, profesor de la Universidad de Portsmouth, ha decidido explicar a través de un artículo publicado en el sitio web Science Alert cuáles resultan más eficaces.

Antes de emprender la tarea de crear una mascarilla de tela conviene conocer qué características son necesarias para que resulte útil ante el coronavirus. Las partículas del virus tienen un tamaño de 0,08 micrometros y los hilos de una cobertura de tela para el rostro poseen unos huecos aproximadamente 1.000 veces más grandes (entre 1 y 0,1 milímetros).

Grabar a alguien vapeando

Una vez conocidos estos datos, el docente británico recomienda pedirle a alguien que vapee y grabarlo mientras expulsa el vapor utilizando una mascarilla. De esta manera, podremos observar con detenimiento cómo este elemento de protección logra contener la respiración. Este experimento se completaría realizando el mismo proceso sin que este sujeto utilice mascarilla.

Una vez grabados los dos procesos, se podrá comprobar fácilmente la diferencia en el resultado entre ambas opciones. Además, Kolstoe aconseja este procedimiento para obtener pistas sobre el diseño ideal de la mascarilla de tela, pudiendo realizar ajustes en este elemento de protección en las zonas que sea necesarias.

Otro test para comprobar la eficacia

El profesor de la Universidad de Portsmouth también recomienda otro sencillo método para comprobar la eficacia de la mascarilla. Éste consistiría en intentar apagar una vela llevándola bien colocada sobre el rostro. Kolstoe aclara que cuanto más complicado resulte apagar la vela, más eficaz resultará la mascarilla. El docente asegura que efectuar todas estas pruebas que aconseja facilitarán la tarea de evaluar la eficacia de la mascarilla.