Pese a que el coronavirus no puede sobrevivir en el agua del mar, sí que lo puede hacer en las aguas residuales. Y eso es motivo de preocupación en los últimos días en la Comunidad Valenciana. La semana pasada eran tres barrios de la capital los que mostraban la presencia del virus, pero ahora son seis.

San Marcelino, Zaidía, Patraix, Mestalla, Benimaclet y Jesús son los barrios afectados y que mantienen en estado de alerta a la Generalitat Valenciana. Por tanto, en las próximas horas Policía Local y Protección Civil se desplegarán por dichos barrios para comprobar que se cumplen las medidas sanitarias establecidas.

Elisa Valía, concejala del Ciclo Integral del agua, ha asegurado este miércoles que "cada semana se toman tres muestras en diferentes zonas de la ciudad para analizar la evolución de los rastros. Gracias a esto, Valencia puede anticiparse a la aparición de brotes y actuar de manera preventiva donde se aprecie una tendencia al alza".

Para la concejala, este sistema permite "tener una fotografía en tiempo real sobre la evolución del virus", además de señalar que "los datos no son alarmantes".

Veinte brotes en la Comunidad

Desde la llegada de la nueva normalidad, la Comunidad Valenciana ha registrado un total de 20 brotes. El más grave de ellos es el detectado en un pub de Gandía, que ya suma 84 contagios. Especialmente graves son también los detectados en Peñíscola y Santa Pola, todos ellos relacionados con el ocio nocturno.

En la actualidad hay 497 casos activos, 79 de ellos en los registrado en el último día. Además, hay 58 personas ingresadas en hospitales y 58 en UCI.