Los hospitalizados por COVID-19, que llegaron a ser más del 50%, están ahora entre el 3 y el 4%
Fernando Simón explicó que la media de edad de los positivos ahora es diez años menor a marzo e insistió en la importancia de los rebrotes comunitarios.
Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, compareció en rueda de Prensa telemática para dar cuenta de los últimos datos del avance de la lucha contra el coronavirus: el domingo se registraron sólo 48 nuevos positivos y ninguna nueva muerte, según Sanidad.
Simón quiso centrarse en su intervención en el perfil de los nuevos positivos que se detectan ahora, que tienen una media de edad diez años menor que al principio de la epidemia, y en el estado de los hospitales. En su momento, los casos de COVID-19 eran más del 50% de las camas hospitalarias de todo el país; hoy, son entre el 3 y el 4%. Y en el caso de las UCIs, a finales de mayo más del 80% de las camas de cuidados intensivos eran por coronavirus, mientras que ahora están en torno al 10%. Así se aprecia en los gráficos que facilitó Simón en su intervención (véalos a continuación).
"Estamos detectando más casos leves, que no requieren hospitalización. Estamos en una situación buena, con una evolución muy favorable, descendemos muy rápido, pero hay que ser prudentes. Sigue habiendo transmisión, hay brotes afortunadamente localizados. Cualquier brote podría pasar desapercibido y desatar nuevos casos, debemos ser muy precavidos", explicó Simón.
También contestó a algunas cuestiones:
Surgen muchos rebrotes en ámbitos hospitalarios. ¿Son los hospitales el mayor peligro?
Ahora mismo se están detectando casos en hospitales, pero son asintomáticos en su mayoría. Tenemos 3400 y pico casos en hospitales, hay un riesgo allí, aunque también hay medidas de seguridad. Los brotes comunitarios son más preocupantes porque pueden pasar desapercibidos, en los de los hospitales es complicado que eso pase. Cualquier día un brote no es detectado a tiempo e incrementa los casos.
Algunos medios extranjeros consideran que España ofrece datos poco fiables como manera de promocionar el turismo...
Yo doy las cifras de la forma más objetiva posible. Tomar los fallecidos como medida de transmisión es un error, porque los pacientes fallecen mucho después de dar positivo. La senda es muy buena. España es un país turístico, pero nuestra capacidad de detección es similar a la del resto de países.
La OMS ha emitido una recomendación de contabilizar también a los sospechosos en los datos de coronavirus, no sólo a los positivos por test PCR.
Son recomendaciones, la OMS no impone los sistemas de vigilancia. Todos los países vamos a tener que hacer correcciones, lo más importante ahora es detectar precozmente.
¿Ve a ciudades como Madrid y Barcelona preparadas para la fase 3?
La situación es buena, pero no es sólo eso. Hay un problema asociado a Madrid y Barcelona, son nodos de comunicación de personas, son peligrosas en ese sentido. Los territorios evolucionan muy bien, pero hay que tomar precauciones.
¿Las mascarillas seguirán siendo obligatorias en el decreto de la nueva normalidad?
Se esta terminando de perfilar. No varía sustancialmente en el asunto de las mascarillas, salvo cambios de última hora. La propuesta es seguir como hasta ahora. Habrá que esperar para ver la redacción final del decreto.
Un estudio en Italia afirma que el virus ha envejecido, que es 100 veces menos virulento...
No he leído el estudio, se están haciendo muchos ahora mismo. No sé si ha perdido virulencia o no, intuitivamente no creo que sea la explicación por los pacientes que vemos ahora. Si se ha debilitado, estupendo. Aunque puede ser un problema, porque si genera casos muy leves, pueden ser más difícil de detectar. Su impacto ahora es mucho menor, eso es cierto. Detectamos más casos leves, la percepción puede ser de menos virulencia.