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Coronavirus

Las cifras dejan en duda el plan de Suecia contra el coronavirus

El país escandinavo, que no ha decretado en ningún momento el confinamiento obligatorio de sus ciudadanos, se está viendo notablemente más afectado que los de su entorno.

El primer ministro sueco, Stefan Lofven.
PONTUS LUNDAHLEFE

Las autoridades suecas decidieron no seguir el ejemplo de sus vecinos ni del del resto de Europa en general en cuanto a la aplicación de medidas severas para frenar a la pandemia del coronavirus. No ha habido confinamiento obligatorio y se han mantenido en funcionamiento los colegios para los alumnos de hasta 16 años y las actividades económicas. Su estrategia ante la COVID-19 se ha basado más en recomendaciones que en imposiciones.

Sin embargo, el plan del gobierno de Suecia no está funcionando del modo que esperaban. Y es que el país se está viendo más golpeado por el coronavirus que los de su entorno, según reflejan los datos de la web Our World in Data. Así, su tasa de muertes por cada millón de habitantes es notablemente superior al de Dinamarca, Finlandia y Noruega. La cifra de Suecia es de 361,02, mientras que en Dinamarca es de 92,71, en Finlandia de 52,88 y en Noruega de 42,80. Unos números que casi doblan la suma de las otras tres naciones nórdicas y que la sitúan por delante de Reino Unido, Italia y España, países que se han visto afectados con dureza por la pandemia de la COVID-19.

El virus se extiende y la situación económica empeora

En cuanto a los casos diarios confirmados por millón de habitantes, los datos tampoco son mejores. La media en Suecia (61,89) es cinco veces mayor que en Finlandia (14,98) y en Dinamarca (13,47) y quince respecto a Noruega (4,06), siendo además el estado que menos test ha efectuado de todos ellos. Igualmente, los registros de fallecimientos diarios por millón de habitantes sitúan a Suecia notablemente por encima de ellos y en cabeza en Europa.

Asimismo, la decisión de mantener las industrias del país en pleno funcionamiento no ha impedido que las previsiones económicas de la Comisión Europea sean negativas. De este modo, se espera que la economía sueca caiga un 6,1% este año después de haber crecido al 1,2% en 2019. Por su parte, el paro aumentará en 2020 del 6,8% al 9,7% y en 2021 apenas descenderá unas décimas (9,3%).