Si no hay rebrotes de la pandemia, las oficinas públicas se abrirán de nuevo a partir del 25 de mayo, en la denominada Fase 2 de la desescalada. Además, una de las condiciones indispensables es que siempre se deberá solicitar cita previa y habrá un aforo limitado, tal y como lo han pactado los sindicatos de funcionarios con el Gobierno.

Esta vuelta al trabajo de los empleados públicos será “gradual, priorizando el trabajo no presencial, la conciliación y la protección a grupos vulnerables", según apunta un comunicado de la federación de servicios públicos de UGT. Se priorizará por tanto el teletrabajo, y aquellos empleados públicos que sean considerados como grupo de riesgo, no tendrán que incorporarse por el momento.

Para poder escalonar la jornada, se permitirá "la flexibilización horaria correspondiente a cada caso, con independencia de la modalidad de prestación de servicios, recomendándose el uso de fórmulas de jornada continuada. Igualmente, para poder atender los supuestos de flexibilización se habilita la posibilidad de ampliar el horario de apertura de los centros de trabajo hasta las 21 horas”, apunta un borrador del acuerdo.

A través de Internet

Pese a que abran de nuevo las oficinas, se seguirán priorizando los medios telemáticos para realizar los trámites, siempre y cuando sea posible. Actualmente, se calcula que más del 60% de los funcionarios están teletrabajando, y por eso se insiste en el uso de las herramientas online disponibles.

Reuniones y procesos de selección

Para evitar los encuentros presenciales o los desplazamientos a otras localidades, las reuniones serán por audioconferencia y teleconferencia. Tan sólo se podrá acudir para una reunión a otro territorio por causas excepcionales. Respecto a los procesos de selección, se retomarán cuando termine el estado de alarma.