Poco a poco los países están empezando a configurar como será la vuelta a la normalidad. En Francia se aprobará el próximo martes las fases de desescalada en el país que comenzará el próximo 11 de mayo, que estará muy basada en los alcaldes de todas las ciudades del país galo. El ministro de Educación de Francia, Jean-Michel Blanquer, aseguró que las clases en Francia volverás a partir del 11 mayo, de manera escalonada, dividiendo en tres frases diferentes esta vuelta.

Los primeros que volverán serán los profesores, que tendrán que asistir a sus puestos de trabajo a partir del día 11 de mayo para empezar a preparar las clases. La primera fase comenzará el día 12 con la vuelta a las aulas de los alumnos de 1º y 5º de primera. La segunda fase comenzará una semana después, el día 18, con la vuelta de 6º de primaria, 3º de secundaría y 2º de bachillerato. La última fase tendrá lugar el 25 del mismo mes con la vuelta del resto de alumnos.

Las clases no podrán tener más de 15 alumnos, por lo que tendrán preferencia a la vuelta de las mismas todos aquellos alumnos más vulnerables que no hayan podido seguir estudiando a vía internet durante el confinamiento, por lo que la vuelta podría ser voluntaria, este punto todavía lo tienen que aclarar las autoridades competentes. En las medias de seguridad los profesores tendrán que llevar mascarillas de manera obligatoria que serán repartidas por Educación Nacional para que todos puedan contar con una.

Para los niños todavía no está asegurado que deban de llevar mascarillas de manera obligatoria. El Ministro está en contacto con un grupo de científicos para valorar si deben de llevarlo, en caso afirmativo, al igual que con los profesores, Educación las entregaría de forma gratuita. Los alumnos deberán de tener una distancia con el resto de compañeros de al menos 2 metros. Todavía tienen puntos que definir como la organización de los comedores o el transporte. Estos puntos se confirmarán el próximo martes.

Uno de los puntos de debate era realizar los test para la vuelta, pero el Gobierno francés no ve viable realizar un test a todos los ciudadanos franceses, por lo que solo se les hará a aquellas personas que tengan síntomas. Casi dos meses más tarde Francia volverá a abrir las aulas.