Coronavirus: ¿hay que desinfectar grifos, pomos e interruptores de la casa?
La rápida capacidad de propagación y de permanencia en superficies del COVID-19 insta a ser meticulosos con la limpieza para evitar introducir el virus en nuestros hogares.
La alta tasa de contagio (R0) del nuevo coronavirus, estimada por la OMS en estos momentos de 1,4 a 2,5, es una de las razones que ha obligado a las autoridades, tanto sanitarias como gubernamentales, no solo al confinamiento, si no a tomar una serie de medidas para detener, o al menos, aminorar su propagación. Debemos respetar el distanciamiento social y no podemos salir de casa para no contagiarnos, pero cuando debemos hacerlo para las excepciones permitidas para ello, por tanto, la consigna es no introducir el virus en casa.
Además de sus vías de propagación, ya sea por transmisión directa u objetos, las autoridades sanitarias mundiales han incidido en su durabilidad. El nuevo coronavirus “puede subsistir en una superficie desde unas pocas horas hasta varios días”, recalcan estudios de la OMS. Así, y según reza el máximo organismo sanitario mundial, la prevención, limpieza y desinfección son claves para eliminar cualquier vector del COVID-19.
Por lo tanto, sí, es debido extremar la limpieza y desinfección de todos los objetos de uso común susceptibles de mayor utilización en nuestros hogares, como bien podrían ser pomos, telefonillos, grifos o interruptores, para evitar o eliminar su contaminación y que se conviertan en superficies de transmisión del virus.
Cómo evitar introducir el coronavirus en casa
Aunque la probabilidad de contagiarnos mediante superficies en un hogar en aislamiento es baja, según la OMS, “un objeto puede contaminarse cuando una persona infectada por el COVID-19 lo toque, o tosa o estornude, sobre él”. De esta manera, el mantra de una higiene meticulosa sigue siendo primordial. No ya solo personal, si no con nuestro entorno. Toda precaución es poca para reducir las opciones de contagio.
Además de indicaciones como quitarnos los zapatos, limpiar las pantallas de nuestro móviles o gafas, usar guantes y mascarilla o lavarnos las manos con agua y jabón, también es de suma importancia transferir esas rutinas de limpieza con superficies de uso habitual como pomos, grifos e interruptores, que suelen ser los primeros elementos que tocamos al entrar en casa. "Puertas, manijas, paños, telefonillo o mando a distancia, es esencial desinfectarlos constantemente con amoníaco", comparten desde Cleaning Services Madrid.
Esas superficies, menos porosas, son ideales para que el virus infecte como primera vía de entrada. Por ejemplo, un reciente estudio de la revista 'New England Journal of Medicine' cifraba en 4 horas la permanencia en cobre, 24 en cartón, 48 el acero inoxidable y hasta 72 el plástico.
Limpiar y desinfectar
No solo hay que limpiar, si no también desinfectar. Algo indisoluble en el contexto actual. Lo ideal es limpiar primero con agua y jabón, para quitar suciedad y la mayoría de gérmenes, y posteriormente desinfectar, para matar bacterias y otros gérmenes. Para esto último, agentes químicos como el éter, el alcohol al 70%, la lejía sin detergente, los desinfectantes que contienen cloro y el ácido peracético son útiles, según recoge Wang Zhou, médico jefe del Centro para el Control de enfermedades de Wuhan. Aunque "existen productos que cumplen también una función desinfectante como las toallitas de bebé, en cuya composición también hay alcohol", aclara Cleaning Services Madrid.