España, sumida en un estado de alarma que se prolongará hasta el 13 de abril, decisión que Pedro Sánchez ya le ha comunicado a los presidentes de las Comunidades Autónomas, atiende cómo es la situación hoy en sus dos países predecesores en lo que a la crisis sanitaria se refiere, Italia y China. El coronavirus es una realidad que nuestro país, y muchos otros, no vieron venir, y aún hay países que hacen 'oídos sordos' a las indicaciones de los que ya han sufrido las consecuencias.

La situación hoy en España es trágica. Los fallecimientos continúan subiendo, superando ya las 1.700; mientras, el número de contagios crece como la espuma, con más de 28.000 personas infectadas. Se trata, por desgracia, de cifras que irán subiendo con el transcurso de los días, mientras esperamos esa ansiada cura.

En China, el epicentro del coronavirus, después de 56 días de aislamiento y cuarentena, se produjo el hecho histórico de acabar el pasado jueves con cero contagios. Los más de 42.000 especialistas médicos volvieron a sus casas con sus seres queridos. Más de 81.304 personas han sido infectadas y el número de muertes en el gigante asiático es de 3.259. La situación está al fin bajo control. Las cuarentenas masivas están dando sus frutos, al fin.

Por otra parte, el caso de Italia es más complicado. No se estimaron las medidas adecuadas desde el principio, y eso provocó que gran parte de la población se moviese por todo el país en busca de una salida antes de llegar a la situación que está atravesando el país ahora mismo. La cuarentena en el que es el país más infectado en Europa, dio comienzo el 10 de marzo, cinco días antes que España. Y ya son más de 53.500 los casos de contagio, y los fallecimientos ascienden a los 4.825, colocándose a la cabeza de los países con más muertes por el coronavirus -superando incluso a China-.

El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, ha prohibido salir a la calle, salvo por extrema necesidad, hasta el día 3 de abril con intención de frenar el contagio masivo que está sufriendo el país. Además, Conte señalaba ante los medios que una vez vaya aminorando el número de casos de contagio, quedará mucho camino por recorrer hasta llegar a extinguir la pandemia. Y el país de la bota acaba de endurecer todavía más sus restricciones ante la falta de avances contra la epidemia.