Lewis Hamilton: "Casi muero en una ola de más de 7 metros"
El legendario piloto de Fórmula 1, conocido aficionado al surf, afirma en una entrevista que surfeó un Pipeline gigante junto a Kelly Slater.
La última vez que Lewis Hamilton apareció por AS Acción fue porque estaba practicando wakesurf en Miami (EEUU). Fue noticia porque lo hacía en el mismo sitio y con la misma tabla que Shakira, justo en esos días en que los rumores los situaban juntos. Decimos que fue "la última" porque ha aparecido varias veces practicando deportes de deslizamiento. Por ejemplo, practicando snowboard en Japón o surfeando en la piscina de olas de Kelly Slater.
En realidad, las credenciales de surf de Lou han sido documentadas durante mucho tiempo. Además del Surf Ranch ha pisado la piscina de olas de Melbourne y en 2021 publicó un emotivo homenaje a Kelly Slater en su cuenta de Instagram: "Probablemente él no lo sepa, pero Kelly cambió mi vida para mejor. Quiero que todos sepan qué gran ser humano es este hombre. Siempre estaré agradecido por el tiempo que me has dado, por tus ideas y tu pasión por las olas. ¡Gracias Kelly! Ganas de volver a surfear contigo".
Ahora, en una entrevista con Robb Report, Hamilton ha contado precisamente una experiencia cercana a la muerte junto al 11 veces campeón del mundo de surf. "Cuando alguien dice 'no puedes trepar ese árbol', lo treparé, incluso si casi con certeza me voy a caer". Como si quisiera demostrar algo, el piloto de Fórmula 1 afirma que hace un par de años, cuando surfeó en el famoso Banzai Pipeline de Hawái (quizás la ola más famosa del mundo), Slater le dijo "no hay forma de que te metas allí". Y yo, con los ojos brillando al ver una ola de más de 7 metros, le dije: "Voy a ir". Quienes conozcan Pipeline sabrán que es posible que Slater haya exagerado bastante el tamaño de la ola... porque si realmente fuera así, algo que ocurre muy puntualmente, cometió una auténtica temeridad.
En cualquier caso, el relato de la experiencia sigue con un "era enorme, un tubo enorme, y podía ver a Kelly descendiendo justo por delante de mí", continúa. "Solo tenía que asegurarme de no ser arrastrado. Así que me sumergí, agarré el arrecife y recé. Pude oír cómo caía justo detrás de mí, como una explosión. Me arrancó la tabla y me la partió por la mitad. Estuve muy cerca del final. Pero eso, por alguna razón, me emociona".