El mundo del deporte outdoor está lleno de encuentros con animales y los osos están entre los que dan más miedo. Por lo menos en América del Norte. No en vano, un estudio publicado el año pasado indica que es el animal que ha causado más muertes en la zona desde 1970. Le siguen el tiburón y la serpiente. Pero ni con estas el protagonista del vídeo publicado en el grupo de Facebook "Washington Hikers and Climbers" parece ponerse nervioso. Claro que en su caso es la 9ª vez que se encuentra con un oso y siempre ha salido airoso de la visita.

El excursionista, de nombre Yuriy Trebushnoy, grabó el encuentro con el teléfono en una mano y el spray antiosos en la otra y aprovechó para recordar algunas cosas en el texto que acompaña al vídeo. No sin antes recordar que "es mi 9º encuentro con un oso y a pesar de que llegó a estar a poco más de 3 metros, nunca sentí la necesidad de usar el spray, solo lo llevaba como precaución". 

"No hay que entrar en pánico. Lo más probable es que el animal esté intentando ir de un punto A a un punto B y simplemente tú estés en el medio. Busca el lugar para volver por donde has venido.

Mantén la calma. Nunca le des la espalda. Camina hacia atrás poco a poco para dar al animal su espacio.

Los animales comunican mucho con el lenguaje corporal. Aprende a entender qué buscan. Los osos negros, por ejemplo, rechinan los dientes, saltan y como último recurso hacen un intento de carga si están asustados o nerviosos, aunque por lo general no agreden a humanos".

En este caso, por ejemplo, explica en los comentarios que lo único que buscaba el oso era un lugar cómodo para pasar, puesto que en un lado del camino había una ladera empinada y en el otro un acantilado. O en otras palabras: "Para que quede claro, el oso solo parece que me persiga, pero no tiene nada que ver. Solo usaba el camino por comodidad. No hubo ni comportamiento agresivo ni tan siquiera contacto visual".